Los jóvenes de Castilla y León en la diáspora son legión. La permanente falta de oportunidades y la necesidad de salir fuera para poder trabajar en según qué sectores empujan, cada día, a cientos de chicos y chicas fuera de los límites de las nueves provincias. Uno de los destinos recurrentes es Madrid. Allí terminan, por deseo o por obligación, muchos de los abogados, ingenieros, economistas o arquitectos formados en la comunidad autónoma.
Conscientes de esta realidad, y preocupados por el inexorable "envejecimiento" de su tierra, un grupo de "exiliados" en la capital de España sacó adelante, hace unos meses, el proyecto "Jóvenes de Castilla y León en Madrid". La idea ha tenido recorrido por las redes sociales y se ha plasmado en diversas reuniones en las que los asistentes han ido poniendo en común sus casos particulares, y han hallado muchas similitudes entre sus historias y las de sus paisanos.
Así lo explica la portavoz del grupo, María José Pérez, que subraya que el grupo tiene "un carácter reivindicativo", y que nació con la intención de "poner sobre la mesa la fuga de talentos" que está padeciendo Castilla y León: "Lo vemos si damos un paseo por los pueblos y por las ciudades, donde cada vez hay más negocios cerrados", lamenta.
Entre los asistentes, "hay de todo", según la portavoz del grupo. Algunos pretenden volver; otros ya han abandonado esa idea: "Si te estableces fuera, cada vez es más complicado. Hay personas que tienen en mente regresar, pero sin que ello suponga una renuncia a la formación", abunda Pérez.
Ese planteamiento, que va dirigido a quienes tienen en su mano acabar con el "abandono", tiene como telón de fondo la idea de que "no se está avanzando". "Pedimos que los jóvenes tengan la posibilidad de quedarse o de poder regresar", advierte la portavoz del grupo, que critica que la atención mediática siempre mire hacia otro lado: "Se incide mucho en Cataluña, pero no tanto en la despoblación", remarca María José Pérez, que afirma que su intención y la del grupo es seguir con esta reivindicación en 2020.
