La compra que puede considerarse "típica" para una cena de Nochebuena es ahora alrededor de un diez por ciento más cara que hace un mes. Así se ve después de analizar los precios que los industriales de un cada vez más vacío Mercado de Abastos ofrecen a sus clientes ahora y los que ofrecían hace unas semanas. La subida se da en los productos más socorridos durante estas fiestas y en prácticamente todos los puestos del mercado.

Como sucede casi todos los años, la subida de precios se nota más en las pescaderías que en las carnicerías, aunque en esta ocasión la explicación es doble. Primero, como sucede en Navidad, los negocios dedicados a la venta de productos marítimos traen ahora un género que no encuentra salida durante el resto del año. Segundo, la borrasca "Elsa" se nota en los bolsillos de los consumidores. El temporal, que ha afectado a varias provincias costeras, ha hecho que muchos barcos no puedan salir a faenar, lo que se ha traducido en una menor oferta justo en la época del año en la que más demanda existe.

Poco género y muchos consumidores interesados en comprarlo componen un cóctel que solo puede traducirse en una subida de precios. Con todo, queda el pescado y marisco de piscifactoría, al que no afecta temporal alguno.

El análisis es complicado teniendo en cuenta que ahora hay en los puestos un producto "premium" que no aparece en otras épocas del año. Los langostinos tienen un precio tan dispar como su calidad y van desde los ocho euros por kilo a los 25. Las cigalas, que hace un mes estaban a unos treinta euros, cotizan ahora a 35, algo más caras, aunque las hay por cincuenta. El pulpo también ha subido, entre los 22 y los 25 euros. Las gambas van desde los doce euros hasta superar los 45, los carabineros están a setenta euros por kilo (más caros que hace un mes, cuando apenas había) y las almejas van desde los 13 euros hasta los 25 dependiendo de su calidad. La merluza puede encontrarse al precio habitual o, para los más "exquisitos", adquirirse a 39 euros por kilo.

En las carnicerías también se puede apreciar que los precios han subido en las últimas semanas, aunque lo han hecho menos que en las pescaderías. Con todo, aquí no pasa lo que en otros negocios. El producto que estos puestos ofrecían a finales del mes de noviembre es prácticamente idéntico al que se despacha ahora, aunque evidentemente durante estos días hay más cantidad de productos típicos que durante otra época del año.

Por partes, la paletilla de cordero oscila entre los 12 y los 13 euros por kilo, una cantidad no demasiado alta para los estándares que se manejan en otra época del año. La pierna, por su parte, está en nueve euros y medio el kilo aproximadamente, sin variación reseñable. El solomillo de cerdo, plato recurrido por muchas familias, está prácticamente al mismo precio que hace unas semanas.

Sí se ha encarecido algo el cochinillo o tostón, que ahora se paga en una horquilla de entre 14 y 15 euros por kilo en las carnicerías del Mercado de Abastos de Zamora. El lechazo oscila entre algo más de once y algo menos de trece, un abanico pequeño, y el pollo de corral está un poco más caro que a finales del mes pasado y ahora roza los seis euros el kilo, nada descabellado por otra parte. El entrecot está a unos trece euros, parecido al chuletón. Aunque no es más caro, sí que se aprecia mucho género de este tipo en las carnicerías, algo que no sucede en otras épocas del año.