El coste que suponen para la sanidad pública los conciertos con empresas privadas para la prestación de servicios suponen cinco millones de euros y medio al año. Es uno de los datos que figuran en los informes del gasto real de las instituciones sanitarias que publica la Consejería de Sanidad y que dan una idea del alto coste que supone mantener el servicio sanitario, aunque no se cobre directamente a los usuarios del sistema.

En total son más de 220 millones de euros los que cuesta el funcionamiento normal de los servicios, incluida la estructura, material, conciertos, personal y gasto en recetas.

Los 61 millones de gasto ordinario de la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Zamora se reparten en cinco grandes apartados: gastos de estructura, farmacia hospitalaria y hemoderivados, material sanitario y otros.

Los gastos de estructura, que suponen 11,6 millones al año (son los datos cerrados de 2018) incluyen los costes de las reparaciones, mantenimiento, conservación, energía eléctrica, gas y calefacción y servicios de limpieza y seguridad.

La partida más importante de este capítulo, sin embargo, se la lleva la farmacia hospitalaria y hemoderivados, con un gasto de 23,3 millones de euros. Existen determinados medicamentos que no se dispensan a través de las oficinas de farmacia, sino en el mismo hospital.

En material sanitario se va otra cantidad importante, de 16,9 millones de euros. Esta partida corresponde al gasto en instrumental, pequeño utillaje sanitario, implantes, material de laboratorio, radiología, medicina nuclear y el resto del material sanitario.

Con 5,5 millones aparecen los ya mencionados conciertos con empresas privadas para la prestación de servicios sanitarios, cantidad que en Zamora no es especialmente llamativa comparada con la de otras provincias de la comunidad. Y con 3,7 millones figura el último de los apartados, donde de reunen los gastos en arrendamientos, gasto en material de oficina, material informático no inventariable, productos alimenticios, lencería y vestuarios, seguros, tributos, comunicaciones y otros gastos diversos.