La historia del centro cívico y del Conservatorio de Música arranca en 2006. Un año después se presenta el proyecto de rehabilitación de la Universidad Laboral y su conversión en futuro Palacio de Congresos gracias a un convenio firmado por el entonces consejero de Fomento, Antonio Silván, y la entonces alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón. Las obras iban a licitarse en enero de 2008 para su comienzo de "manera inmediata" con un coste de más de 15 millones de euros, cerca de 9.000 metros cuadrados de espacio y un auditorio importante.

Las obras comenzaron, pero duraron poco. La crisis de Teconsa, que formaba UTE con la empresa Basante, supuso un punto de inflexión para el proyecto. Entonces empezó a correr el tiempo mientras el Ayuntamiento, entonces del PP, y la Junta daban un plazo tras otro (que nunca se cumplían). La consecuencia fue la existencia de un importante agujero.

En 2017, ya con Guarido como alcalde, se acuerda levantar un centro cívico en lugar de un Palacio de Congresos. Meses después, ante la falta de espacio para esta infraestructura y el Conservatorio, se acuerda llevar el centro cívico a otra parcela y destinar los terrenos del antiguo Palacio de Congresos solamente al Conservatorio.