C. G.

Más de 80 profesionales participaron ayer en la Escuela de Enfermería de Zamora en la jornada central de la 35 Reunión de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Castilla y León, centrada en la reflexión sobre la necesidad de realizar intervenciones lo menos invasivas posibles e incluso "dejar de hacer lo que no tenga evidencia científica". Así lo expresó la jefa de Ginecología del Complejo Asistencial, Paloma Ramos, que inauguró el congreso junto a la gerente de Asistencia Sanitaria, Montserrat Chimeno y los concejales Manuel Alesander Alonso y Concha Rosales.

Ramos indicó que actualmente se hacen menos extirpaciones de útero innecesarias, en los partos se trata de evitar la instrumentalización y lo mismo ocurre con la cirugía conservadora en cáncer de mama, que se ha convertido en el tratamiento estándar.

En Zamora hay 16 ginecólogos, "en este momento somos privilegiados. No quiere decir que dentro de unos meses estemos como casi todos en la comunidad, porque es uno de los problemas que se ha analizado en la asamblea de la Sociedad: Hay problemas muy serios en algunas provincias para poder asumir el trabajo porque tenemos déficit de profesionales. Zamora en este momento por azares de la vida o buena gestión de nuestras gerencias lo tenemos solucionado", señaló la jefe de servicio.