Zamora ha amanecido este lunes con temperaturas a la baja y la niebla cubriendo el cielo de la capital. A primera hora, los termómetros marcaban tres grados, en una mañana que ha dejado patente que el otoño, un mes después, ya se ha instalado con todo su rigor.

Las brumas, eso sí, irán desapareciendo a partir de las doce de la mañana, para dar paso a una jornada con cielos cubiertos y en la que no se descarta la posibilidad de algunas lluvias débiles a partir del mediodía.

En cuanto a las máximas, la Agencia Estatal de Meteorología no prevé que las temperaturas superen los 14 grados.