Entre el 5 y el 29 de noviembre el servicio ferroviario entre Zamora y Ourense se realizará con autobuses, según la información que facilita la compañía ferroviaria en su página web. Fuentes de la compañía indicaron que en estos momentos se está ultimando un plan alternativo de transporte que será dado a conocer en cuestión de horas para su conocimiento por parte de los ciudadanos.
Sería el segundo gran corte del transporte ferroviario derivado de las obras del AVE, después del que tuvo lugar entre el 8 y el 24 de mayo, también entre Ourense y Zamora. De hecho, las obras de alta velocidad se han conseguido llevar a cabo compaginando los trabajos con la circulación de los trenes comerciales y han tenido muy poca incidencia en la circulación normal de trenes.
Según la información que maneja la prensa gallega serán nueve los tramos de la línea de tren entre Galicia y la Meseta los que sufrirán cortes en su utilización de hasta tres semanas para adaptar el tendido a la circulación en alta velocidad donde el AVE vaya a aprovechar parte del trazado actual o se cruce con las vías convencionales.
Las obras, según indican las mencionadas fuentes afectan a tramos situados entre Orense y Toro. A falta de que se cierre el calendario de obras y transportes por carretera que ofrecerá Renfe, los trabajos se extenderán prácticamente durante todo noviembre, pero subrayan fuentes del administrador ferroviario que este será el último gran corte previsto hasta la finalización de la alta velocidad con Galicia. Este nuevo desvío en bus se produce tras el que se llevó a cabo entre el 8 y el 24 de mayo entre Puebla de Sanabria y Ourense, o el más reciente de este mes en la estación ourensana.
Tramos afectados
Los trabajos se desarrollarán en diferentes tramos. Entre Ourense y Paderne de Allariz se montará la vía de alta velocidad, se, remodelará la estación de Taboadela y se sustituirán por sistemas electrónicos las antiguas herramientas eléctricas de enclavamiento, las que permiten guiar, desviar o parar la circulación desde los centros de mando de Ourense o Madrid. El corte no afectará a la circulación de pasajeros en ese tramo porque las obras se llevarán a cabo en horario nocturno. Entre Taboadela y Ourense se rebajará la actual plataforma convencional y se reforzará el tablero del viaducto sobre el Miño, que también será adaptado al ancho estándar, siempre según la información de la prensa gallega.
Tampoco incidirán sobre el tráfico ferroviario de entrada y salida de Galicia las obras previstas de Toro a Monte la Reina, pues los Alvia ya discurren por la línea de alta velocidad, pero sí se verá afectado el tren regional de Valladolid a Puebla de Sanabria.
El corte servirá también para terminar las obras en el túnel del Padornelo y afectará al tramo entre Requejo y Vilavella para rematar el interior y las vías de escape. De Vilavella a A Gudiña se adecuará la base de la vía convencional a la de alta velocidad; de Monte la Reina a Carbajales de Alba se montarán los sistemas de enclavamiento, se adaptará el trazado existente al del AVE y se pondrán a punto los tendidos de tres hilos o carriles, y entre Baños de Molgas y Taboadela se renovará la vía.
ADIF aprovechará el corte del tráfico ferroviario para renovar gran parte de la señalización del trazado y se probará el software de la vía, y además se intervendrá en la salida norte de la estación de Zamora, por los túneles del Bolón y Valorio.
