El Ayuntamiento de Zamora quiere dar un paso definitivo transformar la ciudad. Por eso, la administración dirigida por Francisco Guarido ha preparado un plan inversor que alcanza los 35 millones de euros para zanjar proyectos del pasado y construir nuevas dotaciones del siglo XXI tan necesarias para la capital. El dinero lo pondrá el Consistorio en su mayor parte, aunque existen importantes aportaciones del Estado y también de la Junta de Castilla y León. Y el objetivo, tal y como ha señalado el alcalde, es que, en el año 2022, la ciudad pueda contar con instalaciones nuevas o renovadas, así como rehabilitada buena parte de la Zamora monumental.

Por primera vez, el equipo de Gobierno de Izquierda Unida ha puesto fecha y presupuesto a viejos conocidos. Obras que no se han podido materializar hasta el momento, pero que verán la luz a lo largo de los próximos cuatro años. Es el caso, por ejemplo, de la remodelación del Mercado de Abastos. Una intervención tan esperada como olvidada por parte del Ministerio de Cultura y para la que el Ayuntamiento de Zamora aportará 4,2 millones de euros. Falta por concretar a quién se le adjudica el proyecto de obra y entonces la maquinaria se pondrá en marcha. Se calcula que esté terminado en el año 2022.

Uno de los grandes proyectos anunciados en 2015 y que verá la luz el mandato actual es el de la reconversión de la manzana de la antigua estación de autobuses en edificio de oficinas municipales. El Ayuntamiento de Zamora quiere ahorrarse los costes de alquiler de las instalaciones de Santa Ana y por eso pondrá encima de la mesa tres millones de euros para habilitar este espacio. En dotaciones municipales, destaca también el millón de euros que se va a invertir en construir un edificio accesible y comunicado con la Casa de las Panaderas en la parte trasera situada en el entorno de la Costanilla, donde actualmente hay un aparcamiento.

El parque de bomberos es otro anhelo de tiempos anteriores que deberá estar terminado en el año 2022, según los cálculos municipales. El anterior equipo de Gobierno, con el PSOE a la cabeza, dio un impulso a este proyecto y será Izquierda Unida en solitario quien lo concluya. El presupuesto es de 2,4 millones de euros para la construcción de una nueva sede para el servicio de extinción de incendios en la rotonda del Sancho. Importante será también la inversión de cuatro millones de euros para levantar un centro cívico en Cardenal Cisneros, aunque el Ayuntamiento pagará solo el 30%, siendo el 70% restante dinero de la Junta. También está estimada en 1,5 millones de euros la rehabilitación de la muralla, aunque con cargo al Ministerio de Cultura; y lo mismo ocurrirá con los 8,5 millones de euros que la Junta deberá invertir en el nuevo Conservatorio Profesional de Música.

El Museo de Baltasar Lobo contará con medio millón de euros para instalarse en el Ayuntamiento Viejo antes de que termine el año 2021, mientras que la remodelación del Puente de Piedra contará con la misma inversión. Más dinero se llevarán nuevas expropiaciones en la avenida de la Feria. Concretamente, 600.000 euros para terminar de limpiar la muralla de edificios. Posteriormente, se ejecutará un proyecto de ajardinamiento aún sin cuantificar.

En obras menos espectaculares pero no sin importancia aparecen tres planes de asfaltado, reposición de aceras y arreglo de caminos; cuatro millones de euros para alumbrado led; tres millones de euros para saneamiento; o dos millones de euros para reformar el depósito de agua. A ello habría que sumar el 15% de lo que cueste el Museo de Semana Santa, la recuperación del vertedero de La Hiniesta, la mejora de parques, la inversión en instalaciones deportivas o la construcción de salas de ensayo en el Ruta de la Plata.