Las estaciones de ferrocarril de Zamora carecen de interés estratégico de cara a la entrada de la competencia en la explotación de líneas ferroviarias, que en un futuro no funcionarán exclusivamente con los servicios de Renfe. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha admitido la solicitud del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF y ADIF Alta Velocidad) para que se le exima de facilitar datos a las empresas privadas de las estaciones con un escaso número de viajeros, las consideradas sin importancia estratégica, en las que se encuadran todas y cada una de las estaciones de la provincia.

En concreto, las estaciones de ferrocarril de Zamora capital y de Puebla de Sanabria deberían trasladar a más de 300.000 viajeros anuales o mover ocho mil trenes para ser consideradas prioritarias, y ninguna lo consigue. Sin embargo, la documentación presentada a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia contiene datos interesantes sobre la actividad de las estaciones. En el caso de la terminal ferroviaria de Zamora, considerada ya de alta velocidad, el pasado año sirvió como punto de parada para 4.273 trenes y 179.483 fueron los viajeros que subieron o bajaron de un convoy desde sus andenes.

En el caso de la estación de Puebla de Sanabria, aparece con 13.698 viajeros anuales en 2018 y una cifra de trenes algo más baja que Zamora, 3.857, pese a que el tráfico ferroviario es muy similar en ambos casos, los trenes Alvia que unen Galicia con Madrid y el regional entre Puebla y Valladolid.

En conjunto ambas estaciones moverían al año en torno a 193.181 viajeros, cifra algo más baja que la facilitada en marzo de este año que hablaba ya de 203.000 viajeros usuarios de la alta velocidad en Zamora, en constante incremento sobre todo desde la mejora de los tiempos de conexión con Madrid a partir de 2016.

Al igual de las mencionadas terminales zamoranas de la capital y Puebla, 101 estaciones de ADIF en toda España y seis de ADIF Alta Velocidad no superan los umbrales de actividad fijados para ser consideradas estratégicas.

Otro de los criterios de exclusión de la obligación de ADIF de facilitar datos a las empresas interesadas en entrar a explotar las líneas ferroviarias son aquellos trayectos afectados por obligaciones de servicio público. Es decir, aquellos que se mantienen abiertos pese a su nula rentabilidad porque se consideran necesarios para asegurar la movilidad de los ciudadanos, ante la ausencia de alternativas de transporte. En este caso se encuentran 477 estaciones de ADIF y una de ADIF Alta Velocidad, la de Toledo, en las que se prestan únicamente servicios sujetos a OSP (obligación de servicio público) y no se consideran estratégicas.

Es en este apartado donde aparecen las restantes estaciones activas en Zamora: Abejera, Cabañas de Aliste, Carbajales de Alba, Ferreruela de Tábara, Linarejos-Pedroso, Sarracín de Aliste y Toro. En este caso en el listado no aparece la actividad de las estaciones, ni en número de trenes (dos diarios en el supuesto de las zamoranas) ni de viajeros.

Total, que con estos criterios tan restrictivos sólo han sido consideradas de interés comercial de empresas ferroviarias 54 estaciones de ferrocarril de toda España, tanto de líneas convencionales como de alta velocidad. Y podrían haber sido incluso menos, ya que se han incluido algunas estaciones aún sin cumplir estos criterios de número de viajeros y trenes, como las de Coruña y Vigo-Guixar, gestionadas por ADIF, y las de Santiago de Compostela, Pontevedra y Vilagarcía de Arousa, de ADIF Alta Velocidad.