Hacer obras en casa o afrontar una buena reforma del hogar asusta a más de uno, pero los resultados merecen la pena y con una buena planificación, se pueden evitar molestias y tener todo bajo control.

La Organización de Consumidores (OCU) recomienda que a la hora de hacer una reforma en casa, se cuente con una buena planificación. Para ello, ofrece un decálogo de medidas para organizarse.

La primera de ellas es no improvisar. En este sentido, la OCU aconseja planificar cuidadosamente la obra y pensar en qué momento del año la obra causará en casa el menor trastorno posible. Hay que tener en cuenta además, que "ya metidos en faena, es mejor aprovechar para arreglar alguna otra cosa".

"Por ejemplo, si vas a cambiar el suelo del baño o de la cocina, quizá sea un buen momento para sustituir tuberías", explican desde la OCU sobre una forma de evitar tener que levantar el suelo nuevo posteriormente.

También aconseja la OCU tomar las medidas de la zona en la que se van a hacer las obras y comprobar que los trabajos no afectan a ningún elemento estructural para evitar daños.

Según explican desde la Organización de Consumidores, las obras pequeñas no requieren de permisos especiales, pero a veces se necesita una declaración responsable. Por este motivo, recomiendan a las personas que vayan a hacer obras en casa que se informen antes en el Ayuntamiento de su municipio.

"Lo que sí es obligatorio es comunicar las obras que supongan un incremento de la superficie habitable, ya que afecta al valor catastral de la vivienda y al cálculo de impuestos como el IBI o el IRPF", explica la entidad.

Entre los consejos, la OCU señala que hay que tener el visto bueno de la comunidad de propietarios en el caso de que se vayan a tocar elementos comunes.

En el caso de que la obra solo afecte al piso del propietario, también recomiendan avisar al presidente o al administrador de la comunidad de vecinos sobre el tiempo de duración de las obras.

A la hora de contratar, aconsejan valorar varios presupuestos y si es posible, contar con el que venga recomendado.

También aconsejan elegir una empresa seria, con NIF, cuenta bancaria y un seguro de responsabilidad civil por su actividad.

Entre las últimas recomendaciones, destacan tener todo por escrito, no pagar por adelantado más del 30% o el 40% y comprobar que el IVA aplicado es del 10% y no del 21% siempre que se den una serie de condiciones como que el cliente sea un particular o una comunidad, que la obra sea para una vivienda de uso particular, lleve más de dos años construida o rehabilitada y que la persona que realice las obras no aporte material o este no exceda del 40% de la base imponible.