El Gobierno ha decretado la actuación de urgencia en la A-66 en su tramo entre Benavente y León, situación a la que se llega por el lamentable estado del firme, que obliga a los conductores a circular constantemente por el carril izquierdo para evitar los numerosos baches. Así lo han informado fuentes de la Subdelegación del Gobierno de Zamora, que puntualizan que la decisión se tomó el pasado jueves.

Así las cosas, indican las mismas fuentes, las actuaciones relativas a la remodelación del firme seguirán sus trámites independientemente de que el Gobierno esté en funciones. El proyecto es el mismo que fue confirmado por el ministro Ábalos al secretario provincial del PSOE, Antidio Fagúndez, el pasado mes de mayo, dos días antes de la celebración de las elecciones municipales.

Las actuaciones, de las que no se ha vuelto a tener noticia pero que "siguen adelante", están valoradas en 5,39 millones de euros, tal y como informan fuentes bien entendidas. El tramo afectado es uno de los pocos en los que todavía no se ha actuado, pues hay trayectos de la carretera ubicados en la provincia de León en los que sí se han llevado a cabo varias obras. El Gobierno es consciente de que "el pavimento está muy deteriorado y presenta zonas con cuarteos, con evolución en algunos casos de roderas y baches. Son también numerosos los agrietamientos longitudinales existentes, así como algunas grietas transversales de retracción procedentes de la capa de subbase de suelo cemento".

Lo que se plantea es una rehabilitación de firme mediante la solución de fresado y reposición de las capas de firme en función del distinto grado de deterioro detectado. El cargo de la obra será evidentemente extrapresupuestario, pues España tiene actualmente los presupuestos prorrogados del año 2018 -y así comenzará el 2020-.

De otro lado, las mismas fuentes insisten en que las partidas, escasas, que tiene la N-122 para convertirse en autovía van destinadas a la redacción del proyecto. Cabe recordar, como ya informó este periódico en su edición de ayer, que la última novedad relativa a esta infraestructura es la aprobación de un nuevo estudio de impacto ambiental, paso necesario una vez el que se llevó a cabo hace años caducó por no cumplir en plazo con el resto de los trámites. Dicho estudio cambió parte del trazado en el tramo más cercano a Alcañices.

El documento, publicado por el Ministerio de Fomento escasos días después de que el proyecto de Presupuestos supusiera un jarro de agua fría para la carretera, establecía que la obra tendría un coste total para las arcas públicas de más de trescientos millones de euros. A día de hoy, la culminación de la A-11 es la gran infraestructura pendiente de la provincia de Zamora.