Zamora estará entre 15 y 20 minutos más cerca de Madrid en cuestión de meses, con lo que el viaje a la capital de España será de entre una hora y cinco y una hora y diez minutos. Es lo que se desprende de lo dicho por el ministro de Fomento, José Luis Ábalos durante el viaje de supervisión realizado ayer al tramo entre Zamora y Pedralba de la Pradería, que discurrió entre la base de montaje de La Hiniesta y el cambiador de ancho de vía de la localidad sanabresa.

No se atrevió el ministro a facilitar ni siquiera una fecha aproximada de la entrada en servicio del tramo entre Zamora y Pedralba (dijo que será "en los próximos meses"), a falta tan solo de las pruebas de los sistemas de seguridad, el ERTMS2 que funcionará en este tramo y al que se adaptará también el anterior (Zamora-Olmedo que funciona con el sistema más antiguo, en Asfa) o el de Olmedo a Madrid, que tiene ERTMS pero de primera generación. El resultado es que cuando se ponga en marcha este tramo el tiempo de viaje entre Madrid y Galicia se reducirá en 50 minutos y el de Zamora a Madrid entre 15 y 20.

Ábalos sí ofreció plazos para el tramo final de la línea entre Madrid y Galicia, el tramo entre Pedralba de la Pradería y Orense en el que se está trabajando y que finalizará las obras en los primeros meses de 2020, momento en que empezarán las pruebas. Una vez que estas finalicen (lo que puede prolongarse durante varios meses más) el tiempo de viaje de Madrid a Orense se hará en dos horas y media, y a Santiago, Coruña, Pontevedra y Vigo entre tres y tres horas y media. Los tiempos de viaje a Ferrol y Lugo también se reducirán y de hecho el Consejo de Ministros autorizará este mes la electrificación del tramo entre Orense y Monforte de Lemos.

"Un día como hoy en el que los informativos nos inundan con titulares de alto voltaje quiero reivindicar la política silenciosa, del hacer que vale más que el decir y hoy nos trae aquí un ejemplo de esta política. Llevo 15 meses de ministro de Fomento, cinco en funciones, con presupuesto prorrogado y una situación de dificultad e incertidumbre, pero nada se detuvo, no hemos dejado de hacer lo que teníamos que hacer. Y siempre que hemos podido lo hemos acelerado". Aprovechó Ábalos para destacar el buen trato que ha recibido Castilla y León y el Noroeste en cuestión de infraestructuras, con el "impulso a la A-11, la Autovía del Duero. Ninguna autovía ha tenido un impulso similar en España: hemos dsesbloqueado todos los tramos sorianos y licitado obras por 240 millones de euros". Desde 2004 se han invertidos doce mil millones en el AVE de Castilla y León, uno de cada cuatro euros de todo el país.