La presunta autora del asesinato de su marido en la calle Donantes de Sangre ha ingresado en prisión provisional sin fianza en el centro penitenciario de Topas acusada de homicidio. Así lo decretaba en la mañana de ayer el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Zamora tras tomar declaración a la septuagenaria por espacio de más de dos horas. La mujer ha sido trasladada a la unidad psiquiátrica de la cárcel, donde se le practicará una evaluación para determinar su imputabilidad. No obstante, durante el tiempo en que transcurran las medidas cautelares, la presunta homicida podrá establecer comunicaciones y recibir visitas.

Tras permanecer unas treinta horas detenida por el presunto asesinato de su marido, la acusada era puesta ayer a disposición del Juzgado para tomarle declaración. La septuagenaria acudía en coche policial hasta las dependencias judiciales de la calle del Riego pasadas las diez y media de la mañana y allí permaneció hasta las 13.45, cuando salía esposada y escoltada por dos agentes de la Policía Nacional tras decretarse su ingreso en el centro penitenciario de Topas, en la provincia de Salamanca.

Según han confirmado fuentes relacionadas con el caso a este diario, la causa permanece abierta por un delito de homicidio, que se produciría en la tarde del pasado jueves en el domicilio en que víctima y acusada residían en la calle Donantes de Sangre de la capital. La septuagenaria permanecerá, de momento, en la unidad psiquiátrica de la prisión, donde se le practicará una evaluación para determinar su imputabilidad o inimputabilidad.

Pese a que todas las partes relacionadas con el caso guardan cautela sobre la situación de la anciana y cómo se produjeron los hechos, sí ha trascendido que, en la jornada de ayer, la mujer fue sometida a una valoración forense en el Juzgado de Zamora a fin de determinar su salud mental. Además, en dependencias judiciales, la acusada ofreció explicaciones a la magistrada por espacio de más de dos horas, tras lo cual se decretó el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza.

Mientras todo esto ocurría en el Juzgado durante la mañana de este pasado sábado, la iglesia de María Auxiliadora de la capital zamorana celebraba una misa de funeral para el fallecido, un agente de la Guardia Civil jubilado natural de la comarca zamorana de Sayago y que residía con su mujer desde hace años en la vivienda del barrio de Las Viñas de Zamora en la que ocurrieron los hechos en la tarde noche del pasado jueves, ubicada en las inmediaciones de la estación de autobuses de la capital.