Los embalses y pantanos de la provincia de Zamora encaran el otoño en una situación bastante más delicada de la registrada el año pasado. Así se refleja de los datos distribuidos semanalmente por el Ministerio de Agricultura, que indican que el conjunto de las reservas de agua de la provincia asciende, a fecha de esta misma semana, a 996 hectómetros cúbicos de agua. Porcentualmente, está cubierta el 56,37% de la capacidad de los distintos pantanos y embalses de la provincia.

La situación no es todavía grave, pero sí es delicada. En solo siete días las reservas de agua de la provincia han caído más de un tres por ciento y se han perdido 56 hectómetros cúbicos, siempre según fuentes oficiales.

La comparación con la misma semana del año pasado es bastante negativa. A principios del mes de septiembre de 2018 los pantanos zamoranos contaban con unas reservas de agua que ascendían a 1.122 hectómetros cúbicos. Esto equivalía aproximadamente a un 64% de la capacidad total de la provincia, que asciende a más de 1.700 hectómetros cúbicos.

Con todo, cabe destacar que la situación es bastante mejor que la registrada hace dos años, cuando Zamora y toda España llevaban ya muchos meses sin que se registraran lluvias importantes. Las reservas de agua caían entonces aproximadamente a los 500 hectómetros cúbicos, una situación muy delicada que solo empezó a mejorar con la llegada de 2018, año que dejó bastantes lluvias en Zamora y en las zonas de cabecera de los ríos que bañan la provincia.

El panorama actual no invita todavía a alarmar a la población, pero desde prácticamente todas las zonas de España se indica que el verano que viene, si no llueve en los próximos meses, podría ser realmente complicado. Hace dos años ya se registraron ciertas restricciones al riego y algunos ayuntamientos de la provincia llegaron a plantear las medidas que se aplicarían en caso de que la sequía persistiera.

Los datos por embalses permiten comprobar que el que más agua acumula, como es habitual, es el de Ricobayo. Con una capacidad muy superior a la del resto de las reservas de agua de la provincia, Ricobayo cuenta con 628 hectómetros cúbicos y está aproximadamente al cincuenta por ciento de su capacidad total, establecida en 1.145 hectómetros cúbicos. El pantano de Valparaiso, con capacidad para 169 hectómetros cúbicos, presenta un buen aspecto y cuenta actualmente con unos 155 según el Ministerio de Agricultura.

Por lo demás, cabe destacar que Villalcampo cuenta con 62 hectómetros cúbicos (tiene capacidad para 66), Cernadilla acumula solo 60 de una capacidad total de más de 250 y Nuestra Señora de Agavanzal tiene 32 hectómetros cúbicos, cuatro por debajo de sus capacidades. San Sebastián acumula 29 de los 46 que podría tener, Castro 24 de 27 y Puente Porto, seis de 23.

El aspecto de los cielos durante las últimas semanas, con algunas tormentas "sueltas" en los meses de julio y agosto y sin grandes lluvias en invierno ni en primavera, se deja también sentir en los ríos de la provincia de Zamora. Los datos de la Confederación Hidrográfica del Duero indican que hay varios ríos que bajan total o prácticamente secos. El río Guareña a su paso por Toro se encuentra en esta última tesitura, con un caudal insignificante. Los ríos Almucera, Eria y Aliste tienen una caudal de cero. Tampoco pasa su mejor momento el Duero en su recorrido por la capital zamorana, con solo 23 metros cúbicos de agua por segundo.