Nueve euros por perro al año es la tasa que el Ayuntamiento de Zamora ha implementado para los propietarios de canes en la ciudad. Se trata de un impuesto que pretende contribuir a sufragar los gastos derivados de la rama sanitaria animal, que en los últimos años se han multiplicado por el aumento del censo canino. El recibo habrá de pagarse a partir del próximo año 2020 y se calcula que se podrían recaudar entre 50.000 y 90.000 euros. Una cifra notablemente inferior a los gastos directos e indirectos de la presencia de perros en la capital, que ascienden a más de 200.000 euros anuales.

El concejal de Recaudación y Rentas, Diego Bernardo, ha explicado las razones para la aplicación de esta nueva tasa. “Entendemos que en todos los servicios que ofrece el Ayuntamiento de Zamora participan los ciudadanos que los disfrutan, por lo que es natural que los propietarios de animales participen en la prestación de los servicios para animales”, ha indicado.

A día de hoy, se calcula que el Consistorio invierte más de 200.000 euros en bienestar animal. En materia de gastos directos, la capital invierte en censo telemático, evacuatorios caninos (con mantenimiento, reposición y limpieza), dispensadores de bolsas, zonas de esparcimiento, contrato de limpieza y señalización de zonas de suelta. En los indirectos se encuentra la limpieza de jardines y aceras, la celebración del Día de la Mascota o las campañas de sensibilización.