Nadie trabaja en las obras de ampliación del Teatro Principal desde hace cinco meses. La empresa adjudicataria de los trabajos ha caído en concurso de acreedores y la necesaria intervención en el liceo se encuentra en punto muerto. El patrón es similar al de la reconversión del Banco de España, puesto que el azar ha querido que tan solo se haya ejecutado hasta el momento un tercio del proyecto, lo mismo que en Cristo Rey. El Ayuntamiento de Zamora ha intentado, sin éxito, que la constructora cediera el contrato a otra firma. Por ello, ahora será necesario redactar un nuevo proyecto y pasar por todo el procedimiento de licitación. Un contratiempo que retrasará "bastante" la conclusión de los trabajos, que ya de por sí acumulan años de demora. La actuación, declarada "prioritaria" en 2016, no encuentra la luz al final del túnel.

Tras conocer los problemas de la empresa Arpetec, adjudicataria del proyecto, el Ayuntamiento de Zamora ha solicitado al administrador concursal la rescisión del contrato que les une para ejecutar las obras de ampliación del Teatro Principal. Una intervención que ha dado mucho que hablar por su demora sin fin a lo largo del pasado mandato. La actuación fue uno de los primeros anuncios realizados por el equipo de Gobierno anterior dirigido por Izquierda Unida. Para ello, se consignaron 246.000 euros en el presupuesto, aunque el contrato final se lo llevó la citada empresa por 186.000 euros en febrero del pasado año. Es decir, mejorando la oferta económica en un 24%, a tan solo un punto de la baja temeraria.

Las obras tenían un plazo de ejecución de nueve meses, pero apenas se ha realizado una tercera parte del total del proyecto. Según los cálculos iniciales, el liceo municipal debería haber visto concluida la esperada ampliación a finales del año 2018 aunque, para entonces, las actuaciones tan solo acababan de comenzar. Poco después, la constructora abandonaría el proyecto y ha sido ahora cuando el Ayuntamiento de Zamora ha decidido poner punto y final a la relación contractual sellada tras aquel proceso de adjudicación.

El concurso de acreedores presentado por la empresa ha supuesto un importante revés para la administración dirigida por Francisco Guarido. "A cualquiera le puede pasar", ha manifestado. A partir de este momento, la ampliación del Teatro Principal deberá someterse a una nueva redacción del proyecto con las dos terceras partes que restan por concluir y esperar un nuevo proceso de licitación. "Nos va a suponer bastante retraso", ha manifestado el regidor municipal. Además, el Ayuntamiento de Zamora se ha incautado de la fianza depositada por la empresa, que es de 8.000 euros. Un importe, no obstante, que no cubre el daño realizado por la parálisis de los trabajos.