Javier Nart desgranó recuerdos de la mil en Monte la Reina, "y venía mucho a Zamora. Recuerdo El Lobo, el Rey del pincho moruno y una Zamora que no tiene nada que ver con la Zamora de ahora". De Monte la Reina le queda "un servicio militar baldío, donde no se aprendía absolutamente nada, ni siquiera de arte militar. Aprendías a desfilar, que era absolutamente inútil, a sudar, a maldecir y a perder el tiempo".

Eso sí, "como estabas entre amigos, los fines de semana te venías a Zamora, te tomabas los pinchos morunos, te ibas de copas, y la cosa tenía su gracia". A veces tiraban hacia Salamanca, donde Nart vivió también algunas aventuras. "Recuerdo una en Salamanca, en el barrio de las putas. Se me ocurrió entrar en uno de aquellos bares donde había un retrato de Franco, José Antonio y Ledesma Ramos y me dio por decirle a una de las señoritas aquellas tan amables, oiga ¿estos señores también vienen de putas? Tuve que salir corriendo porque llamó a la Policía. Resulta que la señorita era franquista, coño".

Nart se mostró durante su visita a Zamora amable con todo el mundo que le reconoció y quiso hacerse una foto, aunque prefirió no meterse en "chacos" de la actualidad política, consciente del peso que aún tiene su nombre.