La listeriosis es una enfermedad de origen alimentario causada por la bacteria Listeria monocytogenes, presente de forma natural en el medio ambiente (suelo, vegetación, aguas residuales, etc), desde donde puede contaminar los alimentos. Menos frecuente que la campilobacteriosis o la salmonelosis pero ocasiona una elevada mortalidad entre los grupos vulnerables (ancianos, niños, mujeres embarazadas y personas inmunocomprometidas). Entre las formas clínicas más graves destacan el aborto y la meningitis. Entre los alimentos principalmente implicados en su transmisión se encuentran los alimentos listos para el consumo que no sufrirán un tratamiento posterior, como los productos cárnicos tratados por el calor, los pescados ahumados y ciertos productos lácteos, indica la Consejería de Sanidad.