Uno de los principales problemas que presenta la implantación de la educación infantil universal de 0 a 3 años es la raquítica oferta de centros públicos existente a día de hoy. La capital, por ejemplo, tan solo mantiene abiertos dos centros propiedad del Ayuntamiento de Zamora y uno de la Junta de Castilla y León, como son las escuelas de La Aldehuela, Pablo Montesino y Nuestra Señora de la Concha. En el conjunto de la provincia, en lo público, tan solo aparece un ejemplo más y se encuentra en toro, en la escuela Virgen del Canto. La Consejería de Educación amplía la oferta en sus estadísticas con cuatro centros más que siguen las pautas marcadas pero no son de titularidad pública. Se trata de la Alfonso IX de Benavente, la del Bosque de Valorio en Zamora (gestionada por Eulen) y las municipales de Alcañices y Fuentesaúco.

Con apenas ocho escuelas que pasan las exigencias de la Junta de Castilla y León, la realidad es que existen demasiadas trabas aún para poder conseguir esa anunciada universalidad de la educación infantil pactada por Ciudadanos y Partido Popular en su acuerdo de Gobierno, dentro de las cien medidas de mínimos, para la comunidad autónoma.