El puente de la calle Cañizal se reabre hoy al tráfico a las once de la mañana tras superar la prueba de carga realizada sobre la pasarela metálica de la antigua vía de ferrocarril. La prueba de carga se efectuó con 36 sacas de arena de 700 kilos distribuidas en los laterales para medir la resistencia de la plataforma. El presupuesto de ejecución ha sido de 200.000 euros financiados por el Ayuntamiento.

La actuación ha supuesto pasar de seis a veinte metros de anchura, incuidas las aceras laterales destinadas a los peatones y una altura de casi cinco metros. También se ha instalado un puente de once toneladas, veinte metros de longitud y cinco de ancho para enlazar la antigua vía de ferrocarril Plasencia-Astorga, cerrada desde 1985.

Las obras del ensanche del paso de la calle Cañizal empezaron a finales del mes de abril y resuelven un problema de tráfico y seguridad vial en una de las salidas más concurridas de la ciudad, con una media de más de 11.000 vehículos diarios. Este puente comunica a la ciudad con importantes núcleos de población del alfoz de la capital zamorana como Villaralbo o Moraleja del Vino, así como el acceso a la autovía A-66.

La ampliación era una demanda histórica del barrio de Pinilla.