Little Opera baja el telón. Y lo hace con un balance muy positivo. Así lo cree la directora del festival, Conchi Moyano, que asegura que el festival, cada año más consolidado, ha resultado todo un éxito de público y crítica. "Ha sido un ciclo al que le doy un diez. Cada año funciona todo mucho mejor. Los artistas que han venido a actuar han sido de primera categoría, y el público que ha acudido a ver los espectáculos, también".

Recuerda de hecho Moyano como durante la gala inaugural los espectadores se pusieron dos veces en pie para ovacionar a los artistas. "Fue una actuación muy emocionante", en la que además participó la Orquesta Sinfónica de Castilla y León.

Los dos espectáculos celebrados el sábado también resultaron estar a la altura. Si bien por la mañana el programa comenzó con "Érase una vez... la ópera", una representación dirigida a los niños para intentar acercarles a este mundo de la música, y de la que los más pequeños "salieron encantados", fue por la tarde cuando se estrenó el plato fuerte del festival. Bajo la dirección de Miquel Ortega, el Auditorio de La Marina acogió el estreno mundial de la versión en castellano de la obra "Après-moi, le déluge", un espectáculo que fue un éxito de crítica y público. "Tener al director Miquel Ortega en Zamora ha sido un lujo".

Clausura

El festival cerró ayer con dos obras: "La dame de Monte-Carlo", de Poulenc, y "Pimpinone", de Telemann.

Con libreto de Jean Cocteau, y una duración de ocho minutos, "La dame de Monte-Carlo" fue escrita originalmente como monólogo para una soprano, pero con la intención de que fuese representada. "Pimpinone", por su parte, de Telemann, es una obra cómica estrenada den Hamburgo en 1725 como un "intermezzo" para la ópera "Tamerlando" de Händel. Escrita originalmente en alemán y con arias en italiano, ha sido representada en su versión original, con subtítulos en castellano, para ofrecer así, como es intención del festival, producciones lo más fieles posible a los originales del compositor.

"Little Opera es un espectáculo que año a año se está consolidando', explica su directora, y para muestra, explica Moyano, el aumento en el número de entradas vendidas a través de internet. "Esto demuestra que cada vez hay más gente de fuera que se acerca a ver ópera en una ciudad como Zamora".

También ha aumentado el número de abonos para ver todos los espectáculos, lo que refleja que el público es cada año más fiel al festival.

Cuenta además la directora que aunque acaban de finalizar, ya están pensando en el ciclo del año que vienen, que será el quinto. Aunque aún no puede revelar el nombre de los artistas que intervendrán en la próxima edición, asegura Moyano que ya están en negociaciones con una soprano de primer nivel que ha actuado en el Metropolitan de Nueva York o en el Liceo de Barcelona, entre otros escenarios de todo el mundo.

"Es importante que existan espectáculos y ciclos como Little Opera en Zamora, aunque para ello es necesario, siempre, el apoyo y la respuesta del público", concluye.