Los esfuerzos que el Ayuntamiento de Zamora está llevando a cabo para liberar la muralla en la avenida de la Feria se están viendo mermados por la cada vez mayor presencia de pintadas en otros puntos de la fortificación medieval. Zonas como la trasera de la iglesia de San Isidoro, la ronda de Santa María la Nueva o la ronda del Degolladero lucen una serie de pintadas que no hacen sino atentar contra el patrimonio. La propiedad de las murallas es del Ministerio de Cultura y por eso debería ser el Estado quien se encargara de la limpieza. No obstante, hasta el momento, nada se ha hecho para proteger este monumento en sus diferentes puntos.