Es una imagen recurrente. La estación de tren completamente inundada cada vez que se produce una tormenta, por pequeña que sea. Los viajeros han de remangarse el pantalón y tratar de salpicarse lo menos posible. Escena poco adecuada en una infraestructura que utilizan centenares de personas cada día. Por eso, el Ayuntamiento de Zamora ha decidido atajar el asunto de raíz. La administración dirigida por Francisco Guarido asegura que la avería está localizada y que se encuentra en el colector, que no funciona como debería. En consecuencia, la obra para sustituirlo se realizará a lo largo del presente mandato. Eso sí, con cautela. No en vano, los trabajos son de todo menos baratos, la intervención es complicada y por eso habrá que esperar al momento adecuado para poder llevarla a cabo.

La pasada semana fue la última vez que los exteriores de la estación de trenes de Zamora quedaron completamente anegados. La fuerte tormenta caída durante la tarde del lunes 8 de julio en la capital hizo que se repitiera una escena que se empieza a convertir en habitual cada vez que la capital sufre inclemencias meteorológicas. "Estamos hablando de que se colapsa cada vez que caen cuatro gotas, que ni si quiera hace falta un tormentón", señala Francisco Guarido. "Solo es necesario un pequeño chapuzón y el agua sube hasta un nivel preocupante", explica el alcalde del Ayuntamiento de Zamora.

La situación pasa ya de mera anécdota y por eso en el seno del Consistorio tienen claro por dónde pasa la respuesta. "Es un problema del colector", explica el máximo dirigente de Izquierda Unida. "En nuestro programa electoral para el presente mandato incluimos el cambio de colectores por toda la ciudad, porque este no es el único punto en el que existen problemas", añade. "Tenemos ya dos proyectos, valorados en 500.000 euros y 300.000 euros respectivamente, aunque esta zona de la estación de trenes no entra en ninguno de ellos", revela Guarido.

De hecho, la obra en este punto es más complicada. "Se trata de unos trabajos de muchísima envergadura y de muchísimo dinero", reconoce el alcalde. Por ello, el Ayuntamiento de Zamora debe aún estudiar cuándo se llevará a cabo esta intervención. "Lo que sí podemos decir es que el objetivo es cambiarlo a lo largo del presente mandato", afirma Francisco Guarido. Una obra que se antoja necesaria por el importante volumen de personas que cada día utiliza el sistema ferroviario como medio alternativo de transporte, principalmente, en viajes hacia Madrid en mayor medida que hacia la comunidad gallega.

La estación de tren, no obstante, no es el único punto conflictivo cada vez que se producen tormentas de importancia en la ciudad de Zamora. Al igual que ocurre en este espacio, también es habitual ver inundaciones en zonas como el parque de Huerta de la Frontera, el aparcamiento de la Ciudad Deportiva, o en la rotonda existente por debajo de la cuesta del Bolón. Estampas de zonas anegadas por la virulencia de los elementos.