El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, reclamó este viernes que el Estado compense al Ayuntamiento por todas las exenciones y bonificaciones que le impone en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), una tasa que supone la principal fuente de ingresos propios de las administraciones municipales. El mandatario local realizó estas declaraciones al hilo del anuncio de la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, que advirtió de la intención del Gobierno de hacer pagar a la Iglesia el IBI de las propiedades que no están puestas a disposición del público para culto o actividades sociales.

En ese sentido, Guarido indicó que prácticamente cualquier exención o bonificación "tiene que ver con el Concordato con la Santa Sede, con la Ley de Haciendas Locales o con la Ley de Mecenazgo, por lo que siempre viene impuesta para los ayuntamientos". Por ello, el alcalde entiende que ha de ser el Estado quien compense a las administraciones locales y asuma económicamente el coste de esa ausencia de pago.

El alcalde apuntó que, actualmente, la única bonificación que se compensa es la del IBI de los colegios concertados, lo que supone unos 70.000 euros anuales: "Mi opinión es que quien tiene propiedades tiene que pagar, porque luego el ayuntamiento en cuestión tiene que prestar los servicios", argumentó Francisco Guarido, que reconoció que la medida que propone el Ministerio les beneficiaría "en una pequeña parte". "Todo el mundo tiene que abonar el impuesto, salvo que demuestre que no puede hacerlo", insistió el máximo mandatario municipal.

Por tanto, Guarido estima que tiene que pagar cualquiera, sin importar que el edificio sea "un lugar de culto, un piso o un garaje". El alcalde puso como ejemplo dos bienes de la Iglesia que están exentos de esta tasa, pero que sirven para que la institución eclesiástica obtenga un beneficio económico. Ocurre ahora con la Casa de los Gigantes, por la que cobra un alquiler de "100.000 euros anuales" para que acoja el Museo de Baltasar Lobo, y sucedió anteriormente con la antigua sede del Consejo Consultivo en la calle Ramos Carrión. La Iglesia no paga IBI por ninguno de los dos inmuebles.