La Asociación Zamorana de Empresarios del Comercio, Azeco, pide una nueva regulación de los periodos de rebajas, "algo si no igual muy similar a lo que existía antes de la liberalización" del año 2012. La patronal del sector considera que la liberalización de los periodos de promociones, que se hizo hace siete años para que el comercio pudiera salir del bache de la caída del consumo aparejada a la grave crisis económica, se ha convertido en un problema que impide un mayor impacto de las campañas de rebajas. "Consideramos que no es bueno ni para el consumidor ni para el comerciante", apuntan desde Azeco.

"Los consumidores muchas veces no saben si las tiendas están o no en periodos de rebajas porque está liberalizado y los comerciantes pierden ese efecto llamada que era propio de los primeros días de promociones", aseguran desde la patronal sectorial. "Consideramos que las rebajas tendrían que estar reguladas para que exista certidumbre en los consumidores, que sabrían así el periodo en el que se encuentran y conocerían sus derechos".

La normativa que entró en vigor hace más de una década, estiman desde Azeco, "beneficia solo a las grandes superficies y a las principales cadenas de ropa y calzado, e incluso consideramos que, si se les pide opinión, también abogarían por regresar a la normativa anterior".

Lo cierto es que, a la luz de lo visto ayer, en Azeco tienen razón. El panorama en las tiendas de la ciudad poco tiene que ver con el que había años atrás. En prácticamente ningún comercio, ya fuera local o de una cadena, se registraron aglomeraciones. Muchas personas han aprovechado para hacer sus compras los últimos días de la semana pasada, cuando buena parte de los comercios ya colgaban el cartel de rebajas. La patronal del sector espera unos resultados similares a los del año pasado. "No hay nada que nos indique que puede haber más ventas, pero tampoco creemos que habrá menos actividad".

Consejos

Por su parte, la Organización de Consumidores y Usuarios recuerda unos consejos para los compradores. Primero, "pensar de antemano lo que se necesita, haciendo listas para evitar las compras impulsivas" , habituales en periodos promocionales como este. Además, hay cierta normativa a tener en cuenta, como que los productos deben ser exactamente los mismos que eran antes del inicio de las rebajas, sin que su calidad se vea disminuida por la bajada de precios. Los artículos deben mostrar también el precio que tenían antes del inicio de las rebajas de verano o bien indicar, de forma clara, el porcentaje de la rebaja.

Sobre las condiciones especiales de algunos establecimientos en temporada de rebajas (devoluciones o pagos con tarjeta, por ejemplo) la OCU recuerda que están en condiciones de hacerlo siempre y cuando se indique al consumidor, de forma clara, cuáles son las condiciones de la compra que está realizando. El servicio postventa o la garantía deben ser iguales que en periodos no promocionales y, "si hay algún problema durante las rebajas, hay que actuar como en cualquier otro momento".