Todavía uno de cada cuatro partos que se registran en Zamora son mediante cesárea, una tasa demasiado elevada si se tienen en cuenta las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que indican que la ideal debe oscilar entre el 10 y el 15%. No obstante, esta práctica ha caído de manera significativa en la provincia y en la comunidad en los últimos diez años, al pasar de representar un 26,95 en 2008 al 21,54 por ciento del último año, según los datos consultados por Ical.

En Zamora se registraron durante el año pasado un total de 780 partos en todo el Complejo Asistencial. El 24,4% fueron mediante cesárea. 440 partos, más de la mitad, fueron con anestesia epidural. En total, los partos con epidural fueron todos los posibles, puesto que al resto de mujeres no se les pudo administrar. No hubo, así las cosas, ninguna mujer que, pudiendo dar a luz con epidural, no lo hiciera.

Lo cierto es que en Castilla y León la evolución por centros, con respecto a las cesáreas, es desigual. Así, llama la atención que el porcentaje se eleva a un 34,7 y a un 30,8% en el Hospital Santiago Apóstol, en Miranda de Ebro (Burgos) y en el de Medina del Campo (Valladolid), cuando en el Universitario de Burgos se sitúa en el 15,9%, y en el de Soria, pese a ser un centro pequeño, en un 16,1%.

Todos los hospitales superan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, y por encima de la media autonómica también se encuentran el Complejo Asistencial Universitario de Palencia con un 28,9%; el Santos Reyes, en Aranda de Duero, con un 27,6%; el Hospital de El Bierzo, con un 27,7, junto al Clínico Universitario de Valladolid, con un 26,05%, y el Hospital de Zamora, con un 24,49. Mientras, los menos intervencionistas son, junto a los de Soria y Burgos, el de Salamanca, con un 18,49%, así como el de Ávila y el de Segovia, con un 20,9 y un 20,5, también por debajo de la media autonómica. El Río Hortega, con un 21,09 por ciento, estaría en la media. En la región, uno de cada cinco partos son por cesárea.