Más que reducirse la marcha de emigrantes, dato que se mantiene con altibajos pero sin una tendencia clara a la mejoría (en el último año se fueron 449 personas), el buen dato del saldo migratorio se debe al aumento de las personas que regresan o proceden del exterior (709 en el caso de la provincia de Zamora en 2018).

De estos 709 que regresaron 91 eran españoles, 168 europeos (destacan los 67 portugueses, 43 rumanos y 26 búlgaros), 52 africanos (42 de ellos marroquíes), 120 procedentes de Centro América y el Caribe (58 cubanos y 36 dominicanos entre ellos), 212 sudamericanos (95 venezolanos, 38 colombianos y 28 brasileños como principales colectivos) y 26 asiáticos (once chinos, como principal nacionalidad).

De los 447 que se fueron de Zamora al extranjero uno de cada cuatro, 114, eran españoles, 182 europeos (73 búlgaros, 50 portugueses y 48 rumanos), 27 africanos (19 de ellos marroquíes), 28 centroamericanos (13 dominicanos y 10 cubanos), 69 sudamericanos (18 colombianos el mayor número), además de una docena de asiáticos (la mayoría, 9 de Bangladesh). La emigración la protagoniza sobre todo gente joven, y que el grueso es de los menores de 35 años.