La Policía Nacional y el Colegio Oficial de Farmacéuticos han firmado un acuerdo de colaboración que busca prevenir que se cometan determinados delitos que comienzan con la venta de medicamentos en las farmacias de Zamora.
Según ha explicado el comisario provincial de la Policía Nacional, Ubaldo de la Torre, con esta firma lo que se quiere es, sobre todo, estandarizar las comunicaciones entre las farmacias comunitarias y los cuerpos de seguridad, además de luchar contra situaciones que pueden afectar a la salud y seguridad de los zamoranos, como son el alcoholismo, el tráfico de estupefacientes o los casos de violencia de género.
"Lo que se quiere es dar respuesta a las dudas que se puedan plantear los farmacéuticos cuando se detectan hechos que ponen en peligro la salud pública", afirmó Juan Prieto Corpas, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zamora durante la rueda de prensa previa a la firma del acuerdo entre ambas partes.
Se trata, según dijeron ambos, de unos "protocolos sencillos" que incluyen una serie de correos electrónicos y teléfonos de contacto donde los profesionales del sector pueden explicar sus dudas o denunciar un hecho que estiman puede ser constitutivo de un delito.
Y es que las farmacias, según el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos, "son más que establecimientos que en los que se ofrecen medicamentos veinticuatro horas al día". De ahí la importancia de esta rúbrica que busca luchar, principalmente, contra los delitos desde su origen y antes de que se puedan llevar a cabo.
Así, explicó el comisario provincial de la Policía Nacional, en el caso de que se detecten productos destinados al tráfico de estupefacientes o que ayuden a aumentar el rendimiento deportivo, los farmacéuticos tienen a su disposición el correo electrónico de la UDICO, la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de la Policía.
Si los profesionales del sector se enfrentan sin embargo a la posible venta de productos que se puedan usar para cometer agresiones sexuales u actos de violencia de género, el contacto será con la UFAM, la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer de la Policía.
En el caso de recetas de dudosa procedencia, que creen pueden ser falsificadas, tendrán un correo dirigido a la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV).
Además de todos estos canales de comunicación, se ha facilitado otro correo electrónico en el caso de consultas no urgentes, cuyo destinatario es el Centro del Medicamento.
El 091 sigue siendo, por su parte, el teléfono de referencia en el caso de "urgencia vital", según el comisario, o en supuestos en los que se requiera una intervención rápida para evitar que se cometa un delito.
"Queremos dar cobertura a las necesidades que se han detectado en los últimos años en el sector farmacéutico, ya que las farmacias son "receptoras involuntarias de determinados aspectos que pueden ser relevantes para la Policía, como la falsificación de recetas, el intento de adquisición de productos relacionados con la alteración de sustancias destinadas al tráfico de estupefacientes o los casos de violencia de género".
Esta colaboración, que según resaltaron tanto el comisario provincial de la Policía Nacional, como el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zamora, ya se viene realizando desde hace algún tiempo. De hecho, dio sus primeros frutos el mes de enero, cuando se procedió a la detención de unos individuos sospechosos por haber adquirido envases de clonzazepam con recetas falsificadas "de muy buena calidad" en distintas farmacias.
