A mediados de julio podrían volver a las farmacias las presentaciones de Valsartán, un medicamento para la tensión arterial que fue retirado en su día por los problemas de contaminación durante el proceso de frabricación del principo activo en las dos fábricas de China donde se producía. Así lo asegura el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zamora, Juan Prieto Corpas quien explica que el problema estaba en las nitrosaminas, producto potencialmente cancerígeno, "aunque tenía la misma incidencia tomarse un montón de Valsartán que una chuleta a la brasa". Tras los estudios europeos llevados a cabo se han adoptado otros rangos de medición con el fin de que este medicamento no tenga que ser retirado del mercado y por tanto pueda volver a ser utilizado por los usuarios.

Por otra parte, continúan las faltas de medicamentos. "Los que más nos preocupan son los que no tienen sustitución y ahora mismo el caso más flagrante es el Depakine Retard de 500, que tiene un problema de suministro grave". Es un fármaco para la epilepsia y manía. Es el caso también de "una espuma rectal para la gente que tiene problemas de enfermedades inflamatorias del colon que han dejado de fabricar porque ya no pueden hacerlo al precio que les ha marcado del Estado. Nos tienen muy preocupados porque son medicamentos que dejan de ser accesibles al usuario", explica el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zamora.