España llegó a ser, no hace tanto el país de toda Europa Occidental con mayor tasa de presos en las cárceles, una tendencia que se ha modificado en los últimos años, en los que se observa un paulatino descenso de la población reclusa, a pesar de que no es el reflejo de que se produzcan una menor cantidad de delitos. Es el interrogante al que se enfrentan los protagonistas del curso "Aspectos penales y criminológicos del descenso de la población reclusa en España. Una reflexión sobre nuestra política criminal" presentado ayer por el director de la UNED de Zamora, Juan Andrés Blanco, entidad que organiza la actividad, la coordinadora Esther González, magistrada de la Audiencia de Zamora y Belén Fernández, fiscal y profesora tutora del grado de Criminología en el mismo centro. El curso, dirigido por Alfonso Serrano Maíllo, profesor titular del departamento de Derecho Penal y Criminología de la UNED, se desarrollará en el centro penitenciario de Topas entre el 8 y el 10 de julio, si bien el plazo de inscripciones termina el 1 de julio.

Entre las causas del descenso de penados figuran varias, indicó Esther González. "Algunas tienen que ver con el propio funcionamiento de la Administración de Justicia, por ejemplo en las conformidades que conllevan una reducción de la pena solicitada y a partir de una determinada pena la posibilidad de suspensión es mucho más amplia. También ha habido un cambio legislativo en 2015 que permite una mayor flexibilidad en las suspensiones de condena" o el hecho de que haya posibilidad de libertad condicional una vez cumplida la mitad de la condena. "Y tiene que ver con temas sociales o sociológicos, como el descenso de la población extranjera en España. Hace años el porcentaje de población extranjera en las cárceles era enorme y ahora es mucho más reducido. O colectivos específicos, como los presos de ETA, que al acabarse el terrorismo no entran nuevos siguen los que estaban", indicó la magistrada. Belén Fernández apuntó que pese a que no ha descendido el número de delitos sí es verdad que han variado las penas privativas y el tipo de hechos que se cometen ahora tienen poco que ver con la delincuencia de hace unos años

Respecto al contenido del curso, el primer día intervendrá Alberto Danuís, profesor de Derecho Penal de la Universidad de Málaga, quien hablará sobre el ascenso y descenso de la ocupación carcelaria en España en la última década. A continuación Nieves Sanz disertará sobre la criminalidad de los poderosos y la impunidad y cerrará la jornada la psicóloga Silvia Casaseca Aliste, para hablar sobre los factores de riesgo psicosociales relacionados con los delitos. La segunda jornada, el 9 de julio, la abre el juez de vigilancia penitenciaria Andrés Manuel Encinas, quien se centrará en la libertad condicional. Esther González se ocupará sobre la postura de la Administración de Justicia ante el populismo punitivo y la fiscal Belén Fernández disertará sobre la conformidad.

El miércoles acaba el curso con la intervención de Alfonso Serrano y su ponencia sobre el descenso de la tasa de internos en España y la de Sergio Cámara, profesor de Derecho Penal de la UNED, sobre la relación entre la reducción de la población penitenciaria y la expulsión de extranjeros.

88 años y diez carreras

Juan Andrés Blanco aprovechó la cita para hacer balance de un curso que se ha desarrollado con toda normalidad y con altas tasas de feminización. La alumna más longeva es María, que tiene 88 años es licenciada en Historia y está haciendo Psicología y el más ilustrado otro alumno que cuenta con una decena de carreras.

Blanco alertó a los futuros alumnos que estén atentos a la preinscripción para los máster, requisito imprescindible para matricularse luego y se felicitó por el buen resultado del curso senior, sobre arte y derecho, y su posible extensión el próximo curso a Benavente. No va a haber nuevos grados, ya que Educación Infan