La desaparición del Zamora del Regimiento de Infantería Toledo en1987 supuso el final también para el campo de tiro de Las Chanas, un millón de metros cuadrados de terreno donde los militares acudían para realizar las prácticas. Las instalaciones militares en desuso convirtieron a Defensa en un gran propietario inmobiliario que, aún hoy, se intenta deshacer de miles de hectáreas para convertirlas en dinero constante y sonante. Así acabó el Cuartel Viriato, que pudo ser recuperado por la ciudad para su conversión en Campus Universitario, aunque le costara un precio mediante el intercambio de parcelas. Y así puede suceder con el campo de tiro de Las Chanas, una gran extensión de terreno relativamente cercana a la ciudad, pero que no parece tener interés para nadie.

Claro que hace no muchos años parecía que este terreno se podría recuperar, para bien de la ciudad, en un nuevo centro penitenciario especializado en toxicómanos. No faltaron promesas electorales de los Gobiernos de turno en ese sentido aunque, la verdad sea dicha, el proyecto no acababa nunca de aparecer en la planificación ministerial. Incluso hubo un principio de acuerdo entre Defensa y el Ayuntamiento para la adquisición de los terrenos, donde ubicar el nuevo centro y además un campo de golf. La operación se acabó frustrando hace una década entre acusaciones de la entonces alcaldesa, Rosa Valdeón, de "desinterés" por parte del Ministerio de Defensa.

El asunto se había iniciado, no obstante, en el mandato del anterior alcalde, Antonio Vázquez, con un precio de adquisición fijado en más de 600.000 euros (sustancialmente superior de lo que está valorado ahora) y en el Gobierno central estaba el Partido Socialista. Otra instalación militar, Monte la Reina también salió en su día a subasta, aunque ahora tiene perspectivas de reconvertirse en campo de maniobras. Sólo queda esperar que la operación no se frustre como ocurrió con el campo de tiro de Las Chanas.