La implantación efectiva de la jornada de 35 horas semanales se realiza desde el sábado uno de junio o desde hoy para los trabajadores que no acudan a sus puestos de trabajo durante los fines de semana. Sin embargo, su puesta en funcionamiento para los 85.000 trabajadores con los que cuenta la Junta de Castilla y León requiere modificaciones normativas y adaptación de los calendarios laborales, según apuntan desde Europa Press. Esto puede, por tanto, demorarse unos meses. Así, para hacer posible la efectividad de las 35 horas desde el 1 de junio, se aplicarán transitoriamente los acuerdos adoptados en materia de jornada, manteniendo la flexibilidad horaria anterior a estos acuerdos.

Los acuerdos suscritos se mejoran con el presente acuerdo de manera que los días de compensación de 2019 se disfrutarán en su totalidad antes del mes de marzo del año que viene. Para que los cuerpos docentes de enseñanzas no universitarias puedan disfrutar de la jornada se realizarán las actuaciones que implanten la aplicación de la jornada laboral de 35 horas en las partes lectivas, complementarias y de libre disposición el 1 de septiembre de este año, apuntan desde la Junta de Castilla y León.