La revolución digital ha sido capaz de conectar a personas que están en las antípodas: pueden verse, conversar y hasta compartir experiencias comunes aunque no exista una presencia física. Sin embargo, del mismo modo que la tecnología derriba barreras, desaparecen viejos (y entrañables) usos que tienen una clara impronta física: ¿Cómo sustituir el olor a tinta de una imprenta o de cualquiera de sus procesos, en el pasado puramente manuales?

Conscientes de la ausencia (y nostalgia) de estas prácticas, los organizadores de la exposición Tránsito -que se estrena el próximo lunes en la iglesia de la Encarnación con motivo del cuarto centenario de la imagen- han puesto a funcionar antiguas máquinas y procesos para recuperar los impagables grabados de la Virgen dormida, como la conocen los zamoranos.

Así, estos días se está culminando la estampación de antiguas planchas con imágenes de la Virgen, propiedad del Monasterio del Corpus Christi. El proceso, llamado de grabado calcográfico, se realiza completamente de forma manual, siguiendo un proceso estrictamente manual en la preparación del papel, en el entintado de las planchas de zinc grabadas a buril y en la impresión en tórculo de presión o prensa de rodillo, explica Francisco Iglesias, uno de los comisarios de la exposición.

En realidad, se trata de dos grabados diferentes del siglo XIX, donde se aprecian pequeñas diferencias en la indumentaria de la Virgen del Tránsito. "La única diferencia que se observa es la decoración del vestido de la Virgen, uno lleva estrellas y el otro, flores", reza en la descripción de las placas.

50 copias

Las impresiones, en tirada limitada de 50 copias, serán puestas a la venta. Los ingresos se destinarán al presupuesto para costear las activiades del VI centenario de la imagen, que arrancan el lunes con la exposición de La Encarnación.

La muestra está organizada por el propio monasterio, con el patrocinio del Ayuntamiento y la Diputación de Zamora. Junto a Francisco Iglesias, actúan comocomisarios José Ángel Rivera de las Heras y Bernardo Medina. La devoción por la Virgen del Tránsito es toda una institución en Zamora de forma histórica, más si cabe este año con la celebración de los 400 años de la actual imagen.