En la sede de Víctor Gallego, los dirigentes del Partido Popular encajaron la derrota en la capital con resignación. Muchos ya esperaban un triunfo claro de Izquierda Unida y se preocuparon más por el recuento del resto de la provincia. Los pueblos principales y la Diputación centraron la atención de los responsables del partido, que se encerraron en las entrañas de su oficina antes de salir, a eso de las doce de la noche, para explicar un resultado peor que el del 2015, en líneas generales, pero suficiente para "salvar los muebles" en según qué zonas, como apuntaron fuentes internas de la formación.

Así lo entendió también el presidente de los populares, José María Barrios, que señaló que, en la capital, "hay un efecto Guarido, sin más". El dirigente del PP subrayó que el líder de Izquierda Unida "se ha llevado por delante concejales" de su partido, "y sobre todo del PSOE", y centró el balance en el resto del territorio, donde sí tildó de "positivo" el resultado electoral.

Barrios insistió en que el Partido Popular fue el más votado en el conjunto de la provincia, aunque muchos de los interventores y apoderados de la organización contradecían el mensaje optimista de su jefe con rostros cariacontecidos e intercambios de frases sobre la dureza de una derrota que sufrió especialmente Mayte Martín Pozo. La candidata de la capital compareció ante una pantalla sobre la que iban apareciendo los datos de los concejales: "A la vista está", señaló la todavía presidenta de la Diputación, que estuvo arropada por los miembros de su lista.

Martín Pozo aseguró que ya le había enviado un mensaje de felicitación a Francisco Guarido: "Le he pedido que trabaje para el futuro de la ciudad", explicó la candidata popular, que liderará la oposición a Izquierda Unida desde su grupo de seis concejales: "Han sido unos malos resultados para el Partido Popular, pero seguimos siendo la segunda fuerza", indicó la cabeza de lista de la capital.

En ese sentido, Martín Pozo defendió la campaña realizada por su partido durante estas dos semanas: "Hemos mandado mensajes en positivo y explicando nuestros proyectos", afirmó la responsable del Partido Popular, que abogó por mantener ese tono desde la oposición, y que repitió una frase que ha sido muy habitual desde que fue nombrada candidata: "Me duele Zamora".

Por otro lado, Martín Pozo lamentó que lo que haya calado en los ciudadanos sea "el mensaje de la deuda cero", y se mostró en desacuerdo con que eso sea algo positivo desde el punto de vista del equipo de Gobierno: "En todo caso, si hay errores propios tendré que asumirlos, pero ha sido una campaña de mucho trabajo", insistió la responsable popular.

Tras la intervención de Mayte Martín Pozo, su equipo rompió a aplaudir. La ovación y el cariño de los suyos fue el premio de consolación para una candidata que se mostró afectada por la derrota, como muchos de sus compañeros, a pesar de que Barrios mantuvo el tono positivo ante las preguntas de la prensa.

En sus últimas intervenciones, el presidente popular y candidato para la Diputación Provincial, tiró de números para destacar los "10.000 votos" de ventaja de los suyos sobre el PSOE en el conjunto de la provincia, y concluyó con una frase que resume bien el planteamiento que realizó el ya concejal electo por Morales del Vino: "Hemos mantenido el tipo".

Tras la atención a los medios, en la que también participó la candidata a las Cortes, Leticia García Sánchez, los populares siguieron con el recuento para la Diputación, el feudo que esperan seguir manteniendo tras una noche en la que el PP volvió a dejar escapar el gobierno municipal en Zamora, Benavente y Toro.