Francisco Guarido considera que estos cuatro años han servido para "normalizar" las siglas de Izquierda Unida "frente a los miedos que algunos podían tener al principio". Un mandato caracterizado, a juicio del regidor, por "la austeridad en el gasto político y la cercanía tanto con los empleados como con los ciudadanos". En este sentido, Guarido ha asegurado que ni él ni su equipo han cambiado "ni en la forma de actuar ni tampoco en la de vestir", de manera que, ha indicado, "nadie se ha convertido en un político al uso". El candidato de Izquierda Unida ha destacado la "lealtad en los acuerdos alcanzados con el PSOE y con el resto de grupos" y también la labor económica. "Hemos hecho más cosas con menos dinero y eso no es un milagro, sino que se trata de trabajo, trabajo y trabajo desde el primer día hasta el último", ha señalado. "En definitiva, hemos conseguido la normalidad a través de una buena gestión", ha concluido.