Zamora era un "granero de votos" del PP y, como tal, no necesitaba de políticas que movilizaran el sufragio hacia el Partido Popular. De ahí nacen problemas graves como la falta de oportuniddes económicas o la despoblación. Eso es lo que opina el secretario general de la Federación de Servicios Públicos de UGT de Castilla y León, Tomás Pérez, presente ayer en Zamora en un desayuno informativo organizado por el sindicato.

Además, afirmó que el diálogo social "se paraliza" ante los procesos electorales, ya que "ningún gobierno se compromete a nada unos meses antes, en estas circunstancias políticas, cada vez más inciertas".

En este sentido, Pérez considero que, "por primera vez, tras 32 años de hegemonía política de un partido, soplan vientos de cambio y hay posibilidades reales de que haya un cambio en la Junta", aunque puntualizó que "todo tiene que pasar por un partido bisagra que no sabemos qué va a hacer", en referencia a Ciudadanos.

También consideró que el PSOE y Ciudadanos fueron los dos "grandes triunfadores" de las Elecciones Generales y expresó su esperanza de que el "futuro" del gobierno autonómico sea "de cambio" y que "abra puertas y ventanas". Por otra parte, recalcó que la función pública "empezó a retroceder en derechos en 2008", aunque reconoció que "ha habido cierta recuperación" en los últimos años.