Los vecinos de la calle Villalpando han comprobado entre el asombro y el enfado cómo durante las últimas jornadas se han pintado en las aceras marcas de lo que sería el futuro carril bici que una esta zona con el eje del bosque de Valorio. Una obra "conflictiva", en palabras de Francisco Guarido, que debería contar con una serie de informes y el consenso entre los partidos políticos del Ayuntamiento de Zamora para realizarse con garantías. El proyecto es responsabilidad de la Concejalía de Movilidad capitaneada por Antidio Fagúndez, pero el alcalde ha trasladado a su socio de Gobierno las cuestiones que deberían abordarse previamente para evitar más problemas tanto para los vecinos como en el propio clima político de la Casa de las Panaderas.

Francisco Guarido ha asegurado que, a su juicio, debería haber al menos tres pasos previos a la construcción de este carril bici en la calle de Villalpando. "Así se lo he trasladado al concejal responsable, porque recordemos que esto es una cuestión de la Concejalía de Movilidad y aquí cada uno tiene sus responsabilidades que yo, como alcalde, he delegado", ha manifestado mostrando cierta distancia. "De esta manera, lo que yo creo es que se debería contar con un informe del Consejo Sectorial de Urbanismo y otro de la Policía Municipal a tal efecto", ha señalado. "Además, creo que es una obra que debería contar con cierto consenso político por el momento en que se desarrolla. No tiene sentido que nosotros empecemos un carril bici que puede ser conflictivo y que luego venga otro partido, si así se da después de las elecciones, y diga que lo elimina", ha advertido el regidor municipal.

La señalización objeto de conflicto se puede localizar a simple vista en las calles de Obispo Nieto, Doctor Fleming y Villalpando, lo que ha generado entre expectación y controversia dentro del vecindario. Además, es una zona donde existe un colegio público con el tránsito que ello conlleva en determinadas horas, motivo también de preocupación para quienes allí viven. Francisco Guarido ha asegurado que Antidio Fagúndez ha aceptado "de buen grado" dejar la obra en punto muerto hasta contar con los informes pertinentes. Pese a ello, siempre ha sido objetivo de la Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento de Zamora interconectar la ciudad a través de carril bici y este es un ramal que entroncaría directamente con el bosque de Valorio y su posible continuación a través del sector Gaza por el barrio de Olivares y el río Duero.

Por el momento, parece que la actuación en este punto del barrio de San Lázaro quedará a expensas de los informes y será en un futuro cuando se decida si acometer definitivamente esta actuación en pos de la movilidad urbana sostenible.