S. A.

La Audiencia Provincial se ha visto abocada a absolver al hombre acusado de abuso sexual reiterado, entre 2015 y 2018, por la hija menor de su pareja después de que la adolescente negara ante los magistrados que nada de lo que contó en su día era verdad. Los magistrados abren la puerta en su sentencia a que la Fiscalía Provincial y el propio padrastro puedan denunciar a la menor por un delito de denuncia falsa, al tiempo que aseguran que el testimonio que prestó durante la instrucción del caso no constituye prueba de cargo.

La resolución apunta que lo declarado por la adolescente durante la investigación, ante la policía y el juez de Instrucción, cuando relató episodios de tocamientos a los que le sometió su padrastro, de iniciales J.R.S.C., "no logra superar el examen de los parámetros de la credibilidad", es decir, "de verosimilitud". Existen "importantes dudas acerca de la realidad o veracidad de las imputaciones". Los magistrados cuestionan el relato anterior a la vista oral, que defendió el fiscal contra viento y marea, e incluso no descartan que la adolescente denunciara por móviles espurios, dadas las malas relaciones que mantenía con su progenitora y con la pareja de esta. Llegan a mencionar "odio, resentimiento, venganza o enemistad", sin descartar que buscara favorecer a una tercera persona, en referencia a su padre biológico, al que no mencionan expresamente.

La menor afirmó en su denuncia y en declaraciones ante el juez y el fiscal especializado, Evaristo Antelo, que había sufrido los abusos sexuales durante tres años, lo que negó en el acto del juicio (en el que testificó a puerta cerrada), a pesar de lo que Antelo mantuvo la petición de 6 años de cárcel para el imputado, actitud que "extrañó" al Tribunal provincial, se indica en el fallo, dado el desmentido de la niña. Los magistrados indican que "no son suficientes las creencias manifestadas por el Ministerio Público de que fue ante la policía cuando dijo la verdad". El fiscal pidió a la Audiencia que abriera procedimiento judicial por falso testimonio contra la menor, pero «no por denuncia falsa» como recoge el Tribunal en el fallo.