"No me jodas, ¿eh?". La advertencia de la mujer cayó en saco roto: las dos entradas para la Champions League nunca le llegaron. Y la mujer, ni siquiera aficionada al fútbol, se quedó sin los 400 euros que costaban los dos pases y sus amigos sin sorpresa. La denunciante había encontrado el chollo en un conocido portal de anuncios en Internet y se fió porque "me envió la fotocopia del DNI", explicaba la denunciante.

Tras leer el anuncio, contactó con el anunciante. La oferta inicial era de tres entradas, pero la víctima de la estafa solo necesitaba dos y pudo cerrar el acuerdo con el desconocido en esos términos. El precio final se incrementaba en 1,80 euros para cubrir los gastos de envío. La forma de pago fue mediante transferencia bancaria. Ella cumplió su parte del trato, pero el hombre implicado no. La denunciante nunca más volvió a saber de él, intentó contactar con el imputado, de iniciales M.G.A., "vía telefónica y con mensajes de WhatsApp, pero no contestaba", declaró en el juicio celebrado en el Juzgado de lo Penal, que tuvo que desarrollarse en ausencia del anunciante. La Fiscalía considera que cometió un "delito leve de estafa", por el que exige una multa de 900 euros y el pago de los 401,80 euros a la mujer, y se remite a las declaraciones del procesado ante el juez que investigó la denuncia, en las que reconoció haber engañado a la mujer. "Los ingresos por las dos entradas fueron a su cuenta corriente y no las mandó" a la compradora "ni se puso en contacto con ella", subrayó el Ministerio Público durante sus conclusiones.

Mucho más duro fue el abogado de la víctima al exigir una multa de 6.000 euros porque "nunca tuvo entradas, ni tuvo intención de entregarlas, tuvo intención de estafar". El abogado del imputado pidió la absolución al estimar que nos existen pruebas.