El Ayuntamiento de Zamora ya ha aprobado la propuesta de adjudicación del derribo del edificio de avenida de la Feria 11, que costará a las arcas públicas un total de 150.000 euros y que permitirá a los zamoranos disfrutar de más de trescientos metros lineales de muralla. El Ayuntamiento ha conseguido una significativa rebaja pues el proyecto contaba con 178.000 euros. Solo queda que la empresa adjudicataria entregue la documentación para que la Junta de Gobierno alcance otro acuerdo que permita que las obras comiencen.

En total, el Ayuntamiento ha tenido que pagar 1.224.000 euros a los propietarios del inmueble para expropiarlo, una cantidad significativamente inferior a los más de dos millones de euros que reclamaban. A esa cantidad hay que sumar los 110.000 euros de intereses (los generados en los cuatro años desde la aprobación de la primera sentencia sobre el asunto) y 73.000 euros abonados por el Ayuntamiento a los inquilinos que quedaban en el bloque, una cantidad esta última que ha sido reclamada a los anteriores propietarios.

Tanto este derribo como el de Bajada de San Martín se ejecutarán ya después de Semana Santa, aunque antes de las elecciones según los plazos que maneja el equipo de Gobierno, hechos públicos hoy por el alcalde, Francisco Guarido. Al no poder realizar actos con trasfondo electoral en días previos a las elecciones, las obras comenzarán como meros actos administrativos.

De otro lado, el Ayuntamiento ha aprobado hoy en Junta de Gobierno el nuevo mapa del ruido, que divide a la ciudad en cinco niveles dependiendo del tráfico rodado y del uso del suelo. Más de la mitad de la población, ha detallado Romualdo Fernández, vive en zonas consideradas como “áreas de silencio”, donde los decibelios máximos se limitan a 60 durante el día y 50 durante la noche. El cuarenta por ciento de los vecinos reside en áreas consideradas como leve o tolerablemente ruidosas, situación generada principalmente porque las calles de esas zonas cuentan con un volumen de tráfico importante.