La Real Cofradía de Nuestra Madre de las Angustias reabre mañana al culto su capilla, tras haber permanecido varios messes cerrada por la restauración del retablo de la Virgen de la Espadas.

La intervención, autorizada por Patrimonio y sufragada por la hermandad, ha permitido descubrir unas pinturas barrocas de un calvario y del Espíritu Santo descubrir unas pinturas barrocas de un calvario y del Espíritu Santo en dos hornacinas. Así en la hornacina que hasta ahora ocupaba la Virgen de las Espadas ha aparecido un fondo historiado con el monte Calvario y la ciudad de Jerusalén, donde encaja un crucificado, el Santísimo Cristo del Calvario, que se ha ubicado en ella, por lo que la imagen que hiciera Ramón Álvarez será expuesta al culto en una hornacina situada a la izquierda del altar.