El presidente nacional de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios, Miguel Borra, ha recordado en Zamora la agenda de mejoras que demanda esta organización sindical, que pasa -entre otras- por la recuperación de la jornada de las 35 horas semanales. "Una prioridad en Castilla y León" que, el pasado 12 de marzo, llevó a CSIF a convocar concentraciones ante las delegaciones territoriales de la Junta en las nueve provincias de la comunidad.

CSIF insiste en "que ya no caben más excusas, y que el Gobierno regional debe cumplir su promesa de aplicar las 35 horas, que adquirió ya al inicio de esta legislatura que acaba". Y las pide con independencia de los objetivos del déficit, porque eso es una excusa de mal gestor e injusta hacia los empleados públicos.

En un encuentro con los delegados de CSIF de Zamora, para analizar la situación actual de los empleados públicos, y a las puertas de varias citas electorales, Borra "ha reclamado la recuperación de la estructura salarial previa a la bajada por el Gobierno de Zapatero en 2010" (con una reducción salarial entre el 5 y 10% de media), la primera de una serie de decisiones que se han tomado contra el poder adquisitivo y el sueldo de los empleados públicos en los últimos 10 años.

El desarrollo de la "carrera profesional para todos los empleados públicos; o las equiparaciones y adecuaciones retributivas en ámbitos como Justicia, Instituciones Penitenciarias o la Administración General del Estado son otras de las exigencias de la agenda de mejoras del sindicato independiente".

CSIF exige "que el idioma cooficial no sea un requisito excluyente a la hora de acceder a un empleo público, sino un mérito. Precisamente, uno de los ámbitos que mejoran las retribuciones son los puestos de trabajo de atención al público en comunidades autónomas con lengua cooficiales, cuando acreditan poseer la titulación exigida, para la mejora de la atención que la Administración General del Estado presta a la ciudadanía". El sindicato insiste en que "no pueden ser los funcionarios los que vuelvan a pagar los platos rotos si hay desaceleración económica".