La tormenta política registrada en Zamora durante las últimas semanas ha dejado lugar a la calma derivada de la designación de los primeros candidatos a las elecciones generales. Los partidos mayoritarios ya tienen a sus cabezas de lista y las guerras internas se transformarán ahora en pugnas por los siete puestos que se reparte la provincia entre el Congreso de los Diputados y el Senado. Tan solo Vox falta por mostrar sus cartas, nada extraño al considerar que apenas tiene estructura y que la convocatoria de los comicios le ha cogido a contrapié. A partir de esta próxima semana, Zamora entrará de lleno en la precampaña nacional, lo que obligará a dejar de lado, momentáneamente, las aspiraciones municipales de cara a las elecciones del 26 de mayo.

El Partido Popular ha sido el último de los grandes partidos en dar el paso, aunque no sin polémica. Pablo Casado ha decidido romper con el "marianismo" y por ello ha desplazado a Fernando Martínez-Maíllo de la carrera de San Jerónimo en beneficio de Isabel Blanco, que será la candidata por Zamora. El expresidente de la Diputación acudirá a las elecciones del 28 de abril como número uno al Senado, tal y como había adelantado este diario. Allí le quiere el presidente nacional, en un puesto en el que le podría acompañar José María Barrios como número dos.

El Partido Socialista, al contrario que su principal rival político, fue de los primeros en tener los deberes hechos. Hace diez días que se cerró el proceso de primarias en la provincia y ayer mismo el Comité Federal ratificaba las listas propuestas por la militancia. Mar Rominguera será finalmente la candidata al Congreso, pese al fallido intento de Alfredo González, afín al presidente Pedro Sánchez, de hacerse con ese puesto. Junto a Rominguera, aspirarán a entrar en el parlamento Eduardo Folgado y Remedios Fernández. En el Senado repetirá José Fernández, en la que sería su quinta legislatura, acompañado de Marian Martínez y Luis Malmierca.

Unidas Podemos, por su parte, tiene un papelón que solventar en la provincia de Zamora. La división entre Izquierda Unida y Podemos es más que latente en este territorio y eso ha derivado en la imposibilidad de tener las listas cerradas a día de hoy. A Podemos le corresponde cubrir el número uno al Congreso, que será el secretario de Organización de la formación en Castilla y León, Alejandro Rodríguez. A Izquierda Unida, en consonancia, le toca proponer el número uno al Senado. El problema es que no existe ningún tipo de interés en el partido coordinado por Miguel Ángel Viñas para rellenar ese puesto, dado que la asamblea provincial no cree en el proyecto conjunto. Por eso, no se descarta que sea un paracaidista quien finalmente asuma el rol de encabezar esa lista a la Cámara Alta.

Finalmente, el candidato al Congreso de los Diputados por Ciudadanos será José Antonio Bartolomé, un profesor con trayectoria sindical que ha sido designado "a dedo" desde fuera de Zamora, lo que ha provocado la dimisión en bloque de la directiva naranja. El ya excoordinador provincial, José Antonio Requejo, ha asegurado no entender cómo un responsable de Comisiones Obreras puede encabezar ahora la lista de un partido de "derechas". Un hecho que ha precipitado su marcha.