La Junta de Castilla y León volvió a subrayar ayer el compromiso con los mayores de la provincia, especialmente con lo 9.212 dependientes y el mantenimiento de las 11.737 prestaciones que se ofrecen este año, explicaba el gerente de Servicios Sociales en Zamora, Eutimio Contra, al inicio de la asamblea de la Federación Provincial de Jubilados y Pensionistas. El responsable de la Junta volvía a subrayar que la Comunidad de Castilla y León "es una de las tres que ha mantenido en tiempos difíciles", a pesar de la crisis, la atención a los ciudadanos que no pueden valerse por sí mismos, la mayoría son ancianos en Zamora. Otra cosa son las cuantías que la Administración autonómica destina a los beneficiarios, "que dependen del tipo de prestación y de la capacidad económica" del usuario. El número de castellano y leoneses dependientes se mantiene en los últimos años, según manifestó.

El gerente de Servicios Sociales puso el acento en el respaldo económico del Gobierno autonómico del PP a la Federación de Jubilados y Pensionistas desde su creación, con el desembolso de 44.712 euros al año -un dinero que llega de la Junta a través del acuerdo marco con la Diputación Provincial y el Ayuntamiento de Zamora-, que les sirve para organizar actividades para los más de 19.000 socios de la provincia encaminadas a que se mantengan activos, explicaba su presidente, Balbino Lozano. El máximo representante de los jubilados lamentaba el efecto de la crisis que les impidió conservar los 40 puestos de trabajo indirectos creados con la contratación de monitores para la realización de cursos y otras acciones.

El objetivo de la Federación es "ayudar a los socios a tener un envejecimiento activo, que tengan ocupado su tiempo libre, para lo que se llevan a cabo actividades", concentradas en cuatro o cinco localidades que pertenecen a las asociaciones de la provincia federadas, agrega el presidente, que abunda en la necesidad de "estar unidos" para defender sus intereses. Esta organización cuenta con la colaboración de psicólogos, así como de actividades de diferente tipo, reducidas desde que comenzara la recesión económica y los ingresos descendieran, por lo que se precisa en estos momentos del copago de los socios, "de otra manera sería imposible", advierte Lozano. Entre ellas, la gimnasia de mantenimiento, talleres de entrenamiento de la memoria, promoción del voluntariado, actividades para estimular a personas mayores, para que permanezcan activos, así como charlas y cursos de diversas temáticas. Desde la Federación, se prioriza que los integrantes se sientan y estén acompañados.

La asamblea ordinaria concentró en la capital zamorana a 110 integrantes de las asociaciones de jubilados y pensionistas llegados de todos los puntos de la provincia, ante los que Lozano dio cuenta de la gestión realizada en 2018 y las actividades y del presupuesto de 2019, en el que se incluye el pago de la sede de la calle de El Riego y del administrativo que tienen contratado.