Una semana después de que las Cortes de Castilla y León volvieran a alejar a Zamora de su sueño por convertirse en Patrimonio de la Humanidad, la Asociación Zamorana de Guías de Turismo insta a las administraciones a no cejar en el empeño de lograr el anhelado sello de la Unesco. El colectivo local anima a los responsables políticos a presentar una sólida candidatura en solitario a tenor de las posibilidades de la capital. Si bien es cierto que este mismo argumento fue utilizado en contra por el Parlamento regional para desestimar las opciones de la capital, los guías insisten en no bajar los brazos y seguir trabajando para la consecución de este reconocimiento internacional con una propuesta propia y convincente.

En este sentido, Estrella Torrecilla, una de las profesionales del gremio, recuerda que ciudades como Teruel tienen reconocida su arquitectura mudéjar como Patrimonio de la Humanidad desde 1986 y defiende que el románico de Zamora también es "merecedor" de esta distinción no solo por sus valiosas características, sino también por su envidiable estado de conservación y por el extenso patrimonio en el que está enmarcado, tanto histórico como natural, con el río Duero como uno de sus principales exponentes.

A juicio de Torrecilla, además de las candidaturas unitarias de ciudades como León y Burgos que han sido avaladas por las Cortes, la solicitud del "Románico palentino" cuenta con importantes argumentos para alcanzar la declaración. "El patrimonio de Palencia es magnífico a nivel de la provincia, pero el de Zamora no tiene nada que envidiar, con lo cual bien podríamos nosotros encabezar una candidatura", afirma.

En este punto, los profesionales van más allá y hacen hincapié en la repercusión que este título llevaría consigo para su apertura a un nuevo nicho de mercado y la consecuente atracción de un nuevo perfil de visitantes. Según recuerdan, existen turoperadores y agencias de viajes especializadas en visitar ciudades incluidas en la red de Patrimonio de la Humanidad. "Llevan a sus turistas a visitar estas ciudades y luego hacen una serie de promoción a sus municipios, con lo cual ya no es ser considerado sino lo que conlleva ser considerado Patrimonio de la Humanidad", recuerdan. "Ojalá lo consigamos".

El contra de los "free tours"

Evidentemente, el reconocimiento por parte de la Unesco también traería aparejado un aumento de las visitas guiadas por la ciudad y provincia que no necesariamente redundaría en positivo para los guías oficiales ante el intrusismo profesional que sufre el sector. Tal y como reconocen desde el gremio, si bien han notado el aumento de turistas durante el pasado año, también han detectado un incremento de los denominados "free tours". "Aunque quizá en Zamora no es tan acuciante, sí vemos cómo vienen grupos 'guiados' entre comillas por personas que no tienen ningún tipo de cualificación".

A su parecer, este nuevo modelo de visitas, en las cuales la voluntad del viajero es utilizada como moneda de cambio, no solo esconden un intrusismo laboral sino también un fraude a la Seguridad Social al "no cumplir con las obligaciones tributarias que los guías oficiales de turismo sí cumplimos", defienden.