"El alcalde no tiene capa, pero si tiene capricho lo capamos las hermanas". Esta es solo una de las estrofas del poema que las águedas de San Lázaro le han dedicado esta semana a Francisco Guarido, una creación literaria que ha llegado acompañada de una capa recortable para el agradecido responsable municipal, que ha señalado que prefiere esta prenda a aquella que se les da "a los que solo tienen el poder".
"Hay que ir ligero de equipaje, casi con lo puesto, por lo que tenga que venir. Hoy aquí, mañana en tu puesto de trabajo, o al revés. Obedecer y mandar, qué gran ejercicio para el espíritu. La capa era de los que iban al campo; hoy solo se les da a los que tienen el poder. La capa no es para mí, prefiero el recortable de mis amigas las águedas", ha subrayado Guarido. Este es el poema completo:
El sr. alcalde y la capa
Las águedas de San Lázarovamos a pedir la miaja"pa" la capa del alcalde"pa" que no esté en desventajaCapa tiene hoy Rajoyy capa tiene ahora el Papay el alcalde de Zamora...El alcalde está sin capaAl alcalde no le han puestonunca la capa alistanapero si tiene capricholo capamos las hermanasCon unas buenas tijerasse la vamos a cortary después de picaditaqué bonita va a quedarY cuando esté capadoha de causar sensaciónZamora va a quedar llenade orgullo y satisfacciónPero en vez de capa de honratal vez prefieras primerouna capa de alquitránpara Cardenal CisnerosAlcalde no necesitasverte cubierto de pañotodos somos contingentespero tú eres necesario
