Las confluencias despistan al ciudadano y provocarán un castigo electoral. Así de claro se ha pronunciado el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, que sigue luchando por mantener las siglas de Izquierda Unida en las candidaturas de toda España, aunque reconoce que no es ése el camino emprendido por la dirección nacional.

Preguntado por la marcha del líder histórico de IU Gaspar Llamazares, tras presentarse como candidato con otra plataforma en Asturias, Guarido indicó que "lo he dicho todo sobre los procesos internos de nuestro partido. Saben mi posición. En su día comenté la situación de Gaspar Llamazares. Lo importante en estos momentos es que desde nuestra formación política y a la vista de la experiencia sepamos encaminarnos hacia una mayor autonomía como grupo con los objetivos políticos que siempre hemos marcado y procuremos presentarnos ante la sociedad como lo que somos, un partido tradicional, con unas siglas históricas y un proyecto conocido por todos los ciudadanos. No tenemos que diluirnos ante nadie y debemos reivindicar nuestra personalidad política propia”.

Sin embargo, reconoció el único alcalde de IU en una capital de provincia, "no percibo un giro de la organización nacional en ese sentido, de momento, pero es un deseo, es nuestra posición política en Zamora por eso vamos a luchar". Y, advierte, “cualquier otro planteamiento, como se está comprobando en estos momentos, está condenado al casi fracaso. No queremos participar en experiencias que la vista de lo que está sucediendo en los últimos meses son un puro fracaso".

Por tanto, concluye, "allá nuestra dirección, otras direcciones, las confluencias y todas esas cosas que despistan tanto al ciudadano que se va a desesperar con la situación que planteamos. Creo que cada vez se nos está castigando más y si persistimos en el error persistiremos en el castigo electoral".