El acoso y las amenazas a través de Internet son algunos de los ciberdelitos más comunes en la provincia de Zamora. Junto a las estafas, estas fechorías conforman algunas de las infracciones más frecuentes de los últimos años propiciadas por la llegada de Internet, de ahí que la magistrada de la Audiencia Provincial Esther González centrara ayer su charla enmarcada en la Semana de Salud de la Fundación Caja Rural sobre este tipo de delitos cibernéticos.

A su juicio, Internet constituye un arma de doble filo. Por un lado, se trata de una "herramienta fantástica de trabajo y de transacción comercial que ha revolucionado nuestra sociedad desde finales del siglo XX". Sin embargo, también supone un nuevo campo de acción para los malhechores. En este sentido, González apelaba a la sensatez a la hora de compartir ciertos contenidos en las redes sociales: "Hay que tener mucho más cuidado con las imágenes que se difunden, hay que hacer un uso razonable de ellas", advertía en un mensaje especialmente dirigido a los menores. Asimismo, sin ánimo de demonizar la red, la magistrada invitaba a los asistentes a extremar la precaución cuando se facilitan datos de tarjetas y cuentas bancarias.