Los contratos de trabajo para personas con discapacidad aumentaron en Zamora en los últimos cuatro años un 71,3%, uno de los más altos de Castilla y León, solo por debajo de Ávila, con un aumento que se sitúa en el 72,7% y supone 1.164 contratos nuevos, mientras que en la provincia el número se sitúa en 1.076 personas.

Con estos datos, parece que el fin de la crisis anima el mercado laboral de las personas con discapacidad. En los últimos cuatro años este tipo de contratación ha crecido en la comunidad un 54,9%, es decir, el doble de lo que lo ha hecho en España. En 2017, se alcanzaron los 16.971 contratos, seis mil más que hace cuatro años, pero aún representan apenas el 1,8% de los acuerdos firmados en Castilla y León.

Así se refleja en el estudio denominado "El Mercado Laboral de las Personas Discapacitadas 2017", elaborado por el Servicio de Público de Empleo de Castilla y León (Ecyl y del que se ha hecho eco la agencia Ical, donde se pone de manifiesto el incremento progresivo de las contrataciones en este ámbito, ya que en 2014 fueron 10.950, para pasar a las 12.811 en 2015, las 15.050 de 2016 y, finalmente, las 16.971 que se dieron en 2017.

Por provincias, en el periodo de 2014 a 2017 la mayor variación dentro de las contrataciones se produjo en Ávila, donde pasaron de 674 a 1.164, lo que supuso un 72,7%; seguida de Zamora, de 628 a 1.076 contratos (71,3%); Palencia, de 1.306 a 2.193 contratos (67,9%); Valladolid, de 2.433 a 3.844 contratos (57,9%); Salamanca, de 1.042 a 1.639 contratos (77,3%); Segovia, de 603 a 933 contratos (54,7%); Soria, de 399 a 617 contratos (54,6%); Burgos, de 1.803 a 2.724 contratos (51,1%); y León, de 2.062 a 2.781 contratos (34,8%).

En cuanto a la modalidad, el 39,17% de los contratos suscritos con discapacitados en la comunidad fueron eventuales o de circunstancias de la producción, y el 34,66% de obra o servicio. Sobre el total de contrataciones, el 91,8% lo fueron temporales, y el 8% restante, indefinidas. Si se analiza la evolución en el intervalo 2014-2017, se observa un incremento del 94,10% en el caso de los contratos indefinidos, y del 52,26% en los temporales.

Por sexos, en Castilla y León la contratación masculina con discapacitados ascendió en 2017 a un total de 10.284 -2,19% respecto del total de la comunidad con y sin discapacidad- y en mujeres hubo 6.687 contratos, -1,48% respecto del total de contratación femenina general en Castilla y León-. En lo que se refiere a la evolución interanual, en cuatro años se incrementó la contratación masculina un 50% y la femenina en un 62,85%.

En cuanto a la tasa de estabilidad de los discapacitados en Castilla y León, ascendió al 8,14% en 2017, con más de un punto porcentual sobre la tasa de 2014, y en el intervalo de los últimos cuatro años se registró un ascenso de más de un punto porcentual. Por nivel de formación, un 60% de los contratos realizados con discapacitados (10.317) tienen un nivel de estudios secundarios de educación general y alcanzan el 2,15% de la contratación en general.

Por sectores, la cifra mayor de contratos con discapacitados se registró en servicios (13.154 contratos), seguido de la industria (2.927), construcción (569) y agricultura (49). La contratación con discapacitados en Castilla y León representa, respecto a la contratación general en Castilla y León, en el caso de servicios el 1,95%; en la industria el 1,44%; en construcción el 1,55%; y en la agricultura el 0,89%.

En la comparativa interanual de 2014 a 2017 se observó un incremento generalizado de la contratación en discapacidad en todos los sectores, salvo en construcción, donde disminuyó un 0,34%. Destacó el incremento de los contratos en la industria con un 49%, en servicios un 27% y en el sector agrícola un 8%.

Por subsectores, el mayor número de contratos con discapacitados se registró en el de las actividades administrativas y servicios auxiliares (3.944 contratos), seguido del de la industria manufacturera y hostelería. Entre 2014 y 2017 la cifra en actividades administrativas y servicios auxiliares subió un 54% y destacaron la hostelería y la industria manufacturera, con un incremento del 100 por 100 y del 84%, respectivamente.