Los casos de gripe han aumentado durante la última semana en Castilla y León hasta hacer que la enfermedad alcance el grado de epidemia, según el último informe de la Red de Médicos Centinela publicado ayer. Además los mismos médicos están detectando niveles elevados de circulación del virus respiratorio catarral.

Son los datos más destacados del último informe sobre la vigilancia de la gripe difundido por la Consejería de Sanidad. El nivel epidémico está aún, no obstante, en una intensidad considerada baja, de 80,74 casos por cada cien mil habitantes. La tasa de incidencia acumulada es especialmente alta entre los niños de cero a 4 años, seguido a bastante distancia por los de 5 a 14 años. Sin embargo a partir de los 65 años, que es donde la población tiene una mayor cobertura de la vacuna, la incidencia de la gripe es bastante más baja.

Los virus de la gripe que están circulando son el AH1N1 y el AH3N2, mientras que todavía no se ha detectado el virus tipo B en las muestras de la Red Centinela Sanitaria.

El aumento de la gripe supone un incremento de las consultas a los médicos de cabecera, las visitas a urgencias y la ocupación de las camas en el hospital.

La transmisión de la gripe se produce de una persona enferma a una sana, fundamentalmente por vía aérea a través de las gotitas que se eliminan al hablar, toser o estornudar. También puede transmitirse por contacto directo, es decir, al tocar superficies contaminadas por el virus como por ejemplo, la mano un enfermo y posteriormente llevarse la mano a la boca o a la nariz. Las personas enfermas son capaces de transmitir la gripe desde un día antes del comienzo de los síntomas hasta unos 3 a 7 días después del comienzo de los mismos. Los niños la pueden transmitir incluso más tiempo.

Para evitar contagiar a otras personas es importante cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo al toser o estornudar, lavarse las manos a continuación y evitar lugares cerrados, como el trabajo, colegio, guardería o lugares públicos para evitar contagiar a otras personas. En caso de padecer gripe se recomienda descanso, beber abundantes líquidos, evitar el consumo de tabaco o alcohol y tomar medicación que mejore los síntomas de la gripe (medicamentos para bajar la fiebre), nunca antibióticos si no los receta el médico.